Medio Madrid anda por Zahara de los Atunes. Las matrículas de los autos no les delatan, las formas, el acento y las conversaciones en la playa, mucho. La Gata ha conseguido este año que les dejen tranquilos y lo de la Ley de Costas...(¿de qué?) Corramos un tupido velo. No conozco un garito en mi costa tan especial, con mejor música, y tan peculiar como éste. Esta madrugada, mientras agitaba un gin-tonic en vaso de sidra con mucho hielo, escuchando a Tito Alcedo, me detuve a observar la fauna urbana. La cosa está mú malita.
A un tris de acabar la quincena, ellos y ellas -los que no se comen un colín- hacían alardes para ver si picaban. Por la mañana, los de la nueva quincena llegaron, blanquitos, directos a la arena, al chiringuito. Todos pegados al móvil. Pero ni eso importaba. A mi lado, una nena futurible decía a tres interlocutores por un móvil con música de Shakira: "Oye, que te espero en Zahara, tienes que conocer Cádiz, hay playas como en Cantabria". Habló con tres. Seguro que no se aburre este verano ¿Y si aparecen los tres a la vez? Menudo aprieto, o posibilidad. Cozaz del verano. La gata ni está triste ni es azul.