Pedro Pacheco se jubiló, en Cajasol, el pasado viernes. Y esperará un par de mes, acaso tres, para decidir si reemprende su carrera política y hacia donde. Hoy ha proclamado la necesidad de la "alternancia" en la política andaluza, y ha estado en tertulia con Pedro Ingelmo (Diario de Cádiz) y Antonio Castro (ex director de ABC Córdoba, La Verdad de Murcia y Huelva Información), además de Guillermo Riol y conmigo. Ha contrarrestado el argumentario político que el PSOE jerezano usa habitualmente contra él y que, a su juicio, ha sido desmontado por el PP y María José García Pelayo. Y ha recordado una de las ocasiones en las que el PSOE le tentó, en concreto el que fuera presidente Rafael Escuredo, que le llamó con el interés de captarlo y terminó bien servido de buen vino durante una copiosa comida en el restaurante jerezano El Bosque. Dice Pacheco que en su familia no son muy partidarios de que vuelva a la política, pero ya veremos, de todas formas tendrá que escuchar a los que le quieren.
Pacheco ha compartido mesa de tertulia con nosotros y en especial con Antonio Castro, el único periodista al que, durante su dilatada trayectoria política, le interpuso una querella criminal, que Pacheco perdió, lo que hoy ha reconocido con talante. La grabación completa del programa podréis verla a lo largo del día en la web de Onda Cádiz (buscar el icono de Buenos Días). El primer programa multimedia de la radio y la televisión gaditana ha contado además con un debate sobre la pobreza, más que interesante en estos tiempos de crisis, con tres contertulios: Mateo Sánchez (presidente del Banco de Alimentos de Cádiz), José Macías, concejal de Bienestar Social de Cádiz y Jesús Quilez, secretario general de Cáritas Diocesana.
Estoy seguro que hay un significativo número de personas que no saben cómo colaborar con el Banco de Alimentos, donde se ha detectado -como en Cáritas- que ante la crisis actual se observa un incremento en el número de voluntarios, ya que la situación "hace más sensible" a la población y, de este modo, "crece la solidaridad" entre los ciudadanos y la adhesión a las labores de ayuda social. Toca arrimar el hombro y algunas ideas hemos intercambiado. Y una cosa está clara, la impagable labor que realizan los voluntarios.
Los bancos de alimentos son posibles gracias al trabajo voluntario de mas de mil personas de todas las categorías profesionales y muy frecuentemente jubilados o prejubilados que ceden parte de su tiempo, con un compromiso estable, para atender a todas las necesidades de funcionamiento de los bancos de alimentos. Solo un pequeño grupo de personas es contratado o bien por necesidades de continuidad o por exigencia de ciertas instalaciones técnicas.
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