24 sept 2005

Pacheco, Primo de Rivera y Balañá, demasiao


Me juego un copazo en La Moderna de Jerez o en el Manteca de Cádiz que ni al caballo de Primo de Rivera ni a la Plaza de Toros (si se la carga el enorme) se les ve el pelo de nuevo por Jerez. La verdad es que la plaza no tiene demasiados espectáculos (¿la podría usar más el Ayuntamiento, si quisiera?) y que la temporada taurina por excelencia es En El Puerto. Visto desde el aire, el enclave es ideal para otros usos. Vale. De acuerdo, que quite la plaza pero la haga en otro sitio y que allí monte, por ejemplo, una plaza multiusos para actuaciones, eventos, similares y los grandes mitines que nos esperan en las apasionantes municipales del 2007. Pero tiene reaños la cosa. Ahora, después de tantos años, Pacheco se da cuenta que la plaza es un bodrio y el empresario, el tal Balañá, admite que no hay demasiadas corridas ni actos allí. Esto está cerrado. Al tiempo. Pero ahora queda la estatua de Primo de Rivera, cuando terminen la obra de la Plaza del Arenal, donde no se ha derrumbado ningún muro medianero, como en la calle La Liebre. ¿Verdad político listillo? La crónica de la noticia de referencia el firma el rockero Pedro Ingelmo, periodista habitualmente fino y bien informado, en las páginas del Diario de Jerez.