Vaya tardecita. El alcalde de Benaocaz, el socialista José Rafael Reyes, condenado a siete años de inhabilitación especial por haber contratado a su propio teniente de alcalde, Blas Peña. Yo me lo guiso y yo me lo como. El juez le dice de todo en su sentencia. Y las cosas que pasan en Sanlúcar no pasan en ningún sitio. Un tipo (la que le puede caer encima es menuda) va y crea un correo electrónico, pilla una nota de prensa de Alternativa Sanluqueña (AS) y engaña a toda la prensa informándoles que el edil de Economía y Hacienda ha dimitido. A nadie le extraña tras acusarle el PSOE de hacerse una piscina sin licencia. La nota es coherente y cuela por las redacciones. De pronto, la agencia Europa Press emite un teletipo pidiendo que se anule la noticia. La Guardia Civil lo tiene fácil. Su Grupo de Delitos Informáticos tardará poco en localizar a quien facturó la notita. La que le espera, porque me pido un gorrazo y un comentario cabrón para el ídem. Y eso sin contar que Hernán Díaz ha aplazado su comparecencia ante el juez, la movida de unos vecinos en El Puerto, la droga que llega a Sanlúcar, que el concurso del Carnaval ha comenzado, que aquí tó el mundo está ya de semicachondeo...Menos Barroso, que mañana va a cantar La Traviata. Presiento que no será un buen día para Cabaña.