Javier Ruibal es la voz de mi tierra, de mi sur al que siempre soñé regresar y donde ahora estoy. El día 28 me romperé las manos al aplaudirle cuando le entreguen la Medalla de Andalucía. Lo adelanto. Admiro a Javier por muchas razones, la primera y más especial porque anhela lo que yo, vivir y amar en mi tierra, y volver siempre a ella. Hoy me he sentido feliz al escucharle por teléfono, al leer el teletipo rápido, demasiado breve. Tiempo tendrá de entrevistas, homenajes y cariños. Javier, tú eres Andalucía.