No lo digo yo, aunque creo que la jefa del pueblo es seductora (lo que pasa es que yo respeto a su familia, no como alguno que ustedes saben). Eso lo sabemos todos. Pero que la delegada de Cultura, Dolores Barroso, diga que "la capacidad de seducción" de nuestra primera autoridad es lo que ha determinado que este verano tengamos algunos conciertos es pasarse un poco de la raya (fue la otra noche, en Onda Jerez). Yo, sinceramente, creo que la programación musical es buena, ajustada a los gustos cuarentones (nada que objetar, please) y en la onda sociata: Miguel Bosé, Sabina y Serrat. Pero no pasa nada, iremos a verlos a Chapín, pensando en la cara que pondría el innombrable al ver a los rojos y descamisados vibrar con los carrozones citados. Lo que ocurre es que falta algo de movimiento, de rock & roll de ése que le gusta al hermano de Casto Sánchez Mellado y a mí, leches. Comprendo que Loli Barroso esté enormemente agradecida a su mentora, pero no hace falta que lo propague a los cuatro vientos cada vez que se encarta, porque entre otras cosas, no lo necesita. Salud, Loli, estamos contigo, pero dános más marchita, delegada.En La Voz de Cádiz le han entrevistado