Vale, los sindicatos no se lanzan a la calle, pero ¿hacen bien? No lo tengo claro. Lo que ocurre es que uno examina las voluminosas subvenciones que reciben anualmente y tiene la impresión de que no solo son ya una parte del sistema y que eso debe condicionar de cojones. Es que el sistema se basa en ellos en estos momentos. Es difícil mantenerse en equilibrio en todo esto de la política. Ayer, cuando mi compañero José Rodríguez (sus fotos de Chaves comienzan a ser muy apreciadas incluso por el presidente) me envió este bocado de la realidad del congreso de CCOO, me hizo reflexionar. Y mucho. La dignidad empieza por la libertad y ¿son libres los sindicatos para hacer y decir lo que nos interesa a los trabajadores? Tengo mis dudas.
Hoy no es un día de certezas. El consejero de Empleo, mi paisano Antonio Fernández, ya no tiene dudas de que llegaremos al millón de parados en Andalucía. No debe ser fácil hacer esa afirmación y esbozar una sonrisa como hace Antonio. A mal tiempo buena cara, pensará. Francisco Carbonero, secretario general de CCOO en Andalucía pasea con el presidente andaluz, Manuel Chaves. O no han reparado en el expositor o se han dado cuenta de la imagen captada. Sublime arte este de la fotografía. De pronto, me he acordado de aquella canción de Labordeta.