Lo hemos adelantado hoy en ELECONOMISTA: El Gobierno aprobará previsiblemente mañana mediante acuerdo de Consejo de Ministros una nueva normativa que garantiza la inscripción en los registros de renovables de proyectos eólicos por hasta 6.000 megavatios (MW) nuevos entre 2010 y 2012, y de proyectos termosolares por hasta 2.400 MW entre 2010 y 2013, indicaron a Europa Press en fuentes del sector. Este acuerdo, aseguran las fuentes, responde a la determinación del Ministerio de Industria de fijar una 'hoja de ruta' para las renovables y de incorporar una mayor racionalidad a su desarrollo. Al marcar los tiempos de incorporación de potencia, el departamento dirigido por Miguel Sebastián aspira a dotar al sector de certidumbre y predictibilidad. El texto dará entrada a la nueva potencia de forma escalonada. Aunque no establece cupos proporcionales de incorporación anual, el ritmo medio de entrada será de 2.000 MW anuales para la eólica y de 600 MW para la termosolar.
Los proyectos inscritos en estos cupos recibirán la prima recogida en el real decreto 661/2007, en el que se recogían unos objetivos particulares para el desarrollo de cada tecnología. En el caso de la eólica, el límite de 20.155 MW prácticamente se ha superado y se hacía necesario fijar un mecanismo transitorio hasta que se publique la nueva norma para el sector.
El real decreto ley 6/2009, del 30 de abril, da a la eólica una solución transitoria al crear el registro de preasignación de potencia en el que se da entrada a los proyectos que podrán seguir disfrutando de la prima del 661/2007.
Además, en este real decreto se apela a la posibilidad de establecer restricciones anuales a la ejecución y entrada en operación de tecnologías que entren en el sistema una vez superados los objetivos fijados. Industria ha recogido esta posibilidad y ha trasladado al Gobierno el mecanismo para dar entrada de forma escalonada en el tiempo a las nuevas instalaciones. De esta forma, los promotores podrán saber cuándo entrarán en el sistema sus proyectos y en qué condiciones, lo que les facilitará la elaboración de los planes de inversión y la obtención de créditos bancarios. Al mismo tiempo, el Gobierno da una salida sostenible a los planes de crecimiento del sector y responde a una inquietud ya adelantada en el preámbulo del real decreto ley 6/2009, en el que se aludía a los riesgos a los que se enfrentan el sistema y a los posibles perjuicios para consumidores y promotores si no se aplican reformas regulatorias.