He visionado parte de la cinta del pleno celebrado ayer en el Ayuntamiento de Cádiz y no doy crédito. Veo y escucho al vociferante Rafael Román -ex presidente de la Diputación, ex consejero de Cultura- (¿busca quizás destacar para que no lo dejen en la cuneta en las próximas convocatorias electorales?) y al indescriptible Pérez Peralta, la garantía real del PP para seguir ganando en Cádiz capital.
Sus gestos burdos, los gritos, los comentarios despectivos, la mala leche que gastan, qué mieo tú. Sé que igual es impopular, pero me da igual. Creo que Teófila Martínez tenía que haberlos puestos en la calle, porque cuando esta gente (uno de ellos, encima, es diputado patrio) le faltan al respeto se lo faltan a la primera autoridad de la ciudad.
Por otra parte, en mi opinión, Teófila Martínez debería dar un giro radical a sus modos, a sus intervenciones, practicar un parlamentarismo local más pausado, tiene ya suficiente experiencia como para saber a qué me refiero.Usar aquel estilo que sacaba de quicio a los socialistas en su etapa parlamentaria más fecunda. ¿Es que nadie se atreve a darle ya consejos sinceros? Lo dudo. Tiene buenos asesores.
Yo creo que lo que un sector del PSOE busca es que un día pierda los nervios y aplique el reglamento, mandándolos a la Plaza de San Juan de Dios, al fresco, con la Policía Local. Ese día, que los chicos del maíz anhelan, se lanzarán a la yugular de la alcaldesa-diputada, con todo tipo de acusaciones fascistas contra ella y el coro de la patata del régimen se sumará al aquelarre pepero. Ya que son incapaces de darle la vuelta a las encuestas (la madre del cordero), le atacan en el terreno personal, menoscabando su autoridad, tratando de que pierda los papeles ante las cámaras y las grabadoras. Intentando que aparezca autoritaria, mandona y gritona para que pierda votos.
Querida Teo, más vale una colorá que ciento amarilla. Agarra el reglamento y haz que todos -empezando por los tuyos- lo cumplan a rajatabla, porque esto no puede seguir así, con Pizarro dándole brea al puente de mando y el dúo Román & Peralta arreándole todo lo que pueden a la alcaldesa de su ciudad. La crónica de Melchor Mateo en el Diario de Cádiz es para guardarla, la verdad. Teófila Martínez debería hacer caso a Rafael Román cuando le pide que "presida", y presidir el pleno hasta sus últimas consecuencias, con el reglamento en la mano y el verbo templado. Sin dejar pasar una. Los electores agradecen un gesto de autoridad ante quien la desprecia. Siempre. Buenos días y buena suerte.
