29 ene 2010

Marbella: cuando el consenso funciona


La Comisión de Ordenación del Territorio y Urbanismo de Andalucía (COTUA) ha dado hoy el visto bueno para su aprobación definitiva al Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Marbella, un documento “clave para el futuro de la ciudad, que devuelve la confianza y seguridad jurídica y urbanística al municipio” y que prevé más de 1.800 millones de euros en inversiones en los próximos ocho años, ha asegurado la alcaldesa, Ángeles Muñoz, al término de la reunión mantenida en Sevilla.
El documento, que ha recibido luz verde sin ningún voto en contra y con una única abstención (Ecologistas en Acción), es el primer PGOU de la ciudad en 24 años y convierte a Marbella en la primera localidad del litoral andaluz con más de 100.000 habitantes en aprobar de forma definitiva su planeamiento de acuerdo a la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA). “Es un plan que garantiza el futuro de la ciudad; planifica el reparto de zonas libres, de equipamientos, de infraestructuras y de viviendas; rediseña el papel fundamental de Marbella y potencia su cualificación como motor económico de la región”, ha subrayado la regidora.
La primera edil ha destacado que la gestión del nuevo PGOU supone una importante inyección económica para la ciudad con un total de 1.823 millones de euros previstos en el horizonte de ocho años, destinando el Ayuntamiento el 6 por ciento del total (100 millones de euros); la misma cuantía el Gobierno central, mientras que a la administración autonómica le corresponderá desembolsar el 31 por ciento y a la privada, el 57%.
El informe de la COTUA recoge una serie de correcciones de errores que el Ayuntamiento tendrá que incluir antes de la publicación del Plan, junto con la suspensión de una serie de piezas urbanísticas que quedan fuera del ordenamiento para garantizar el principio de igualdad de trato en atención a la preservación de los espacios libres existentes en el litoral, una de las estrategias del modelo de ciudad. En concreto, se trata de las zonas conocidas como Jardines de la Costa, Alvarito Playa, Alcotanes, un área aislada cerca de un establecimiento hotelero que afecta a espacios libres de una vivienda unifamiliar y la zona comercial de la Plaza del Mar. Ninguna de estas suspensiones impide la aprobación definitiva del documento y su puesta en marcha.
Una vez que se aprueba el documento, la Consejería entiende que se entra en una nueva fase donde no acaba la labor de definición urbanística, sino que, sobre el modelo de ciudad aprobado, tendrán que analizarse aquellos casos particulares sobre los que los Tribunales valorarán los intereses en conflicto. Desde la Consejería de Vivienda se estima que las administraciones han de ser sensibles a la hora de atemperar de forma racional ante los tribunales los intereses urbanísticos para que prevalezcan los sociales o de cualquier otro tipo que se estimen en las sentencias judiciales. (Foto: José Rodríguez)