Campanas para una campaña negra
A mí no me engañan. Basta leerlos para darse cuenta hoy como saborean la derrota, se relamen los labios con la sangre de las víctimas que han contribuido a desangrar. Se les nota el resentimiento, el doble juego, el interés económico y, sobre todo, la mala leche. Ni les cito, porque es fácil saber sus identidades. Pero de ahí a que todos veamos las cosas del color que ellos las pintan va un abismo, ni de coña. Ya somos adultos para que nos vengan a contar milongas...sobre el éxito, el fracaso y sus protagonistas. Joder.
Si nos ponemos a analizar lo sucedido nos vamos quedar a gusto y eso me pide el cuerpo, con los protagonistas cara a cara. Pero la vida sigue, hay otros afanes y es preciso pasar página para emprender nuevos proyectos. Total, no todo lo que dicen esos vampiros mediáticos es falso, en algunos aspectos de sus análisis tienen razón. Dejo algunas preguntas: ¿Quién forma el club del lápiz?¿quién ha financiado dos campañas electorales bajo cuerda? Mañana más.
