La Fiscalía Anticorrupción se está empleando a fondo en dos casos: Rumasa y los ERES. El azar quiere que dos piezas básicas de esos casos tengan que ver con Jerez; el empresario José María Ruiz-Mateos y el ex consejero de Empleo, Antonio Fernández, hoy presidente del Consejo Regulador de Jerez.
En el caso de Nueva Rumasa, las investigaciones llevadas a cabo por Anticorrupción están destinadas a averiguar el destino de los 140 millones de euros que el 'holding' de la familia Ruiz-Mateos ha obtenido por la emisión de estos pagarés ante un posible delito de estafa a los inversores.
En el de los ERES, Anticorrupción puso ayer de los nervios al PSOE con un nuevo escrito dirigido a la magistrada Mercedes Alaya, del Juzgado de Instrucción Número 6 de Sevilla en el que apunta a un parlamentario andaluz socialista, Ramón Díaz y pide más documentación a la Junta.
Lo que extraña en Jerez es que los dos casos de los asesores no avancen más rápido en los juzgados como sería de esperar. O hay falta de medios, o los asuntos se han complicado demasiado por las partes.
Por el bien de los encausados y de los ciudadanos ambos casos, con una fuerte carga política, deberían progresar adecuadamente o ser archivados como ha ocurrido con la presunta trama Gürtel en relación al Ayuntamiento de Jerez y a la futura alcaldesa.
Buenos días y buena suerte
Pepe Contreras
