El Palacio de Marismillas, en el parque de Doñana. Foto y Copyright J.C. |
El presidente, Rodríguez Zapatero y la alcaldesa de Sanlúcar, Irene García. |
Serán sus últimas vacaciones en Doñana como presidente del Gobierno. Y están llenas de significado. El presidente, Jose Luis Rodríguez Zapatero, llegará hoy acompañado de su familia a Doñana para disfrutar de unos días de descanso antes de que vuelva al trabajo el próximo 19 de agosto, jornada en la que se celebrará un Consejo de Ministros. Si se prodiga o no en algún paseo por Sanlúcar es un misterio, la verdad, aunque sus relaciones con la alcaldesa de Sanlúcar son, como es sabido, excelentes. Zapatero viajó ayer Palma de Mallorca para reunirse con el rey Juan Carlos en el Palacio de Marivent en el último despacho que ambos celebrarán en la residencia veraniega de los Reyes.
El subdelegado del Gobierno en Huelva, Manuel Bagó, precisó ayer en rueda de prensa que en esta ocasión, como cada vez que un presidente del Gobierno viene al coto de Doñana, desde las comandancias de la Guardia Civil de Huelva y Cádiz se ha diseñado una estrategia especial de seguridad.
Asimismo, ha indicado que, en principio, no está previsto que Zapatero realice ningún acto público durante su estancia en Doñana, como ha sido habitual en otras ocasiones. Desde 2008 no había vuelto Zapatero a veranear en Doñana, donde también estuvo en 2007, ya que su destino preferido de los últimos años ha sido Canarias.
El presidente del Gobierno se alojará en el Palacio de Las Marismillas, de titularidad estatal y uso protocolario. El ex presidente del Gobierno Felipe González acostumbraba a veranear en Doñana junto a su familia, y José María Aznar invitó a Doñana a otros presidentes como el británico Tony Blair, el mexicano Vicente Fox o el colombiano Álvaro Uribe.