Acabo de pedirme el libro de Bill Clinton. Se llama Back to work, "de vuelta al trabajo", "volver a trabajar", "de nuevo al curro", tradúcelo como sea, pero probablemente uno de los mejores presidentes de los Estados Unidos (salvo eso que ya sabemos) sabe de qué va la cosa, por eso alaba y critica a Obama en su obra, que comienza a ser objeto de serios debates en su país. ¿Interesante? Pues claro porque analiza la crisis en el país y plantea medidas para fomentar el empleo y la competitividad. "La capacidad (de EEUU) para competir en el siglo XXI depende de la voluntad para invertir en infraestructuras", opina Clinton en su libro. "Back to Work: Why We Need Smart Government for a Strong Economy". Sorprende que Clinton plantee la necesidad de que Estados Unidos mejore la velocidad de su banda ancha en internet, que modernice su red eléctrica nacional, los sistemas de distribución de agua y lasinfraestructuras de aeropuertos, trenes, carreteras y puentes, una excelente oportunidad de negocio para empresas europeas.