Hay muchos españoles y españolas, jóvenes y no tanto, que han vuelto a hacer las maletas para trabajar fuera, donde haya empleo y perspectivas. Se cumplen hoy veinte años de la muerte de Antonio Molina, sin duda, uno de los más grandes cantantes de copla y flamenco de España. El insigne patriarca de artistas cantó a quienes dejan esta España querida y malherida. Su canción más recordada es Soy minero, pero también serán eternamente recordados éxitos como "Adiós a España, Soy un pobre presidiario, Cocinero, cocinero, o María de los Remedios".