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| Mariano Rajoy y Rodrigo Rato. Foto J.C. |
Este viernes Rajoy parece que va a anunciar "medidas importantes" para el sector financiero, pero tengo la impresión de que la más esperada -que fluya el crédito a pymes, autónomos y familias- no figura. De la misma forma que la promesa de que se pagará el IVA cuando se cobre la factura (lo que aliviaría muchas pequeñas economías empresariales) se hace esperar demasiado. Ignoro la paciencia que tendrá el presidente de ATA, mi paisano Lorenzo Amor. Pero hay pocos avances para los autónomos y poco crédito, lo que dificulta enormemente cualquier iniciativa.
Rodrigo Rato, presidente de Bankia, ex ministro con José María Aznar y ex director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), se ha marchado hoy de la entidad financiera desatando todo tipo de especulaciones. Un terremoto financiero. Nueve años después de que Aznar los enfrentara por la sucesión en el PP,
Rajoy y Rato han vuelto a verse las caras, y Rato ha vuelto a perder. Así lo ve Lucía Méndez en su blog. Otra forma de ver la dimisión de quien junto a Montoro protagonizaron los mejores momentos de la economía en los ocho años de Aznar.
La herencia de la gestión del anterior presidente de Caja Madrid, el discutido Miguel Blesa, en torno al sector del ladrillo, ha pesado mucho. Rato justificó a EL MUNDO su dimisión "para que no se entienda que las eventuales ayudas
públicas han sido decididas para favorecer a una persona ligada al PP". Loable intento del ex ministro, pero todo el mundo lo pensará. El grupo Bankia tiene 10 millones de clientes y más de 400.000 accionistas.
Junio es el mes frontera, dicen algunos que saben, para conocer si nuestro sistema aguanta. Rajoy no ha descartado inyectar liquidez al sector financiero si fuera necesario, pero in extremis. Carlos Herrera ha hecho lo que ha podido hoy con el presidente del Gobierno durante su entrevista en Onda Cero. Son tiempos duros, tiempos salvajes, donde cualquier cosa puede pasar.
