A lo largo de mi vida alguno ha intentado que me comieran los perros de la calle, pero ay amigo, eso no ha sucedido porque los perros de cuatro patas tienen más corazón que los de dos. Y porque resulta que el que lo intentó era más perro que los que estaban en el otro lado. Unos y otros me entienden bien. Son cosas de esta bendita profesión a la que, una y otra vez, nos aferramos sabiendo que nunca nos haremos ricos con ella, acaso vivir un poco mejor.
Llega un momento en el que necesitas revivir de nuevo la sensación de ser útil, de tomarle el pulso en la calle. Ahí está, a diario, mi apreciado compañero y amigo Jesús Lominchar (RNE) llevando solo RNE con una dignidad y una calidad que para sí quisieran algunos que hablan encima de los postes que han acabado con la radio cercana. Una pena que Onda Cádiz radio sea un repetidor cutre de lo que ofrece la televisión pagada por todos. La de cosas que se podrían hacer...
Gracias a un empresario valiente, singular, Jesús Lebrero, un puñado de profesionales andamos peleando como el primer día por sacar adelante un nuevo proyecto en la que, dicen, es la cuna de la libertad. Cádiz necesita aire fresco, porque lo que veo no me gusta nada.
He vuelto a tomar el micrófono, a patear la calle con una cámara, que maneja espléndidamente un todo terreno, José Antonio Segura. Me resistía a contaros estas cosas, por pudor, pero me apetece y como en este blog siempre he mandado yo, escribo estas líneas.
Gracias a Eulogio García Romero, fotoperiodista gaditano pese a quien le pese, que merece un sitio digno. La foto es de él. Y estoy hablando con Juan Carlos y Rocío, de Juventudes Comunistas, de las cosas de esta puta y bendita España. Nos vemos en la calle, y en los bares.
