El embajador de los EEUU, James Costos. Foto JCS |
Magnífica foto de José Contreras (Sánchez). De su galería en Flickr |
Hacía tiempo que no sufría tal nivel de incompetencia profesional en un acto. Me refiero a la organización del trabajo de los periodistas, gráficos y operadores de cámara durante el 60 aniversario de la Base de Rota. Primero ¿a quién se le ocurre montar la tarima de las autoridades con una espléndida puesta de sol detrás que jode todos los planos salvo los 'creativos', amén de posibles daños a las cámaras por enfocar directamente al sol?
Con situarla al otro lado hubiera bastado, y encima hubiéramos tenido de fondo al imponente buque Juan Carlos I, y olé. Luego se hubiera habilitado un palco o zona acotada para hacer más cómodo el trabajo de redactores y cámaras (hacinados en un microbús que nos llevó y sacó del muelle 2 de la base). Tuvimos que ir con trípodes arriba y abajo, de una posición a otra, para no molestar.
Para colmo nos reprocharon que quisiéramos estar en "misa y repicando", por eso de hacer de periodistas multimedia. Gran trabajo el que hace Isabel, la abnegada compañera de Efe. Y ni agua, oiga, ni tiempo para acercarnos al furgón de los helados, a palo seco.
Y nada de alternar con las autoridades un ratito (con el embajador ni en sueños, con lo mediático que es según su currículum vitae), para cambiar impresiones. Lo normal, lo que se lleva en cualquier país civilizado y libre. Y una cosa, no estoy enfadado, digo lo que digo porque sé de lo que hablo y ha sido mi trabajo, al otro lado, durante algunos años. Por lo demás, a ver si alguien toma nota, aunque lo dudo, la verdad. Un desastre. Menos mal que las fotos, el vídeo y la crónica salieron bien.
Más fotos en Flickr, galeria de JCS
Crónica de la manifestación de Navantia en EL MUNDO
Con situarla al otro lado hubiera bastado, y encima hubiéramos tenido de fondo al imponente buque Juan Carlos I, y olé. Luego se hubiera habilitado un palco o zona acotada para hacer más cómodo el trabajo de redactores y cámaras (hacinados en un microbús que nos llevó y sacó del muelle 2 de la base). Tuvimos que ir con trípodes arriba y abajo, de una posición a otra, para no molestar.
Para colmo nos reprocharon que quisiéramos estar en "misa y repicando", por eso de hacer de periodistas multimedia. Gran trabajo el que hace Isabel, la abnegada compañera de Efe. Y ni agua, oiga, ni tiempo para acercarnos al furgón de los helados, a palo seco.
Y nada de alternar con las autoridades un ratito (con el embajador ni en sueños, con lo mediático que es según su currículum vitae), para cambiar impresiones. Lo normal, lo que se lleva en cualquier país civilizado y libre. Y una cosa, no estoy enfadado, digo lo que digo porque sé de lo que hablo y ha sido mi trabajo, al otro lado, durante algunos años. Por lo demás, a ver si alguien toma nota, aunque lo dudo, la verdad. Un desastre. Menos mal que las fotos, el vídeo y la crónica salieron bien.
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