El culebrón de las obras del tranvía es impresentable. Dos buenos políticos como Pepe Loiza y Fernando López Gil deberían, junto a la consejera de Fomento, Elena Cortés, abordar de una vez por todas los problemas de la construcción del tranvía entre Chiclana y Cádiz, esencial para la economía de la bahía gaditana. Sean prácticos y piensen en el interés general, es el camino. Podemos. Por cierto, las unidades que vendrán a Cádiz se prueban en Ávila (vean el vídeo).