Santiago Galván. Foto Juan Carlos Toro (LVDS) |
Leer escuchando
Another star, Stevie Wonder
Cada vez aguanto menos a los falsos, es que me repatean el estómago.
Y menos aún cuando además se creen que no te das cuenta de su falsedad. Encima
de malas personas son bobos de solemnidad. Hoy he marcado distancia con uno de
esos malos y bobos personajes, y Dios sabe que tenía que hacerlo para no tener
que aguantar más que me estreche la mano y me sonría cuando nos encontramos en
algún acto o por la calle. Un tóxico
menos. Que le den. Un tipo capaz de vender su alma al diablo por unas
monedas, y de engañar a gente profesional. Punto.
Un libelo es un escrito en que se
denigra o infama a alguien o algo. Ante uno el afectado tiene que reaccionar y
puede elegir varios caminos. Puede recurrir a la denuncia judicial, a ofrecer una explicación pública que refute
punto por punto las acusaciones o (no lo recomiendo) sacudirle una buena
bofetada al autor consciente de que la falta tendrá una sanción. Creo que la
primera es la mejor opción, y eso ha hecho Santiago
Galván, uno de los ediles del gobierno local socialista apoyado por
Ganemos e IU aunque no estén el
ejercicio del poder. Punto.
Hoy comparecen en rueda de prensa
en Jerez el presidente del PP de Cádiz, Antonio Sanz (que también es delegado
del Gobierno en Andalucía) junto a la senadora y concejala María José García Pelayo. Dicen que van
a abordar “asuntos de actualidad”. Y a
los que ellos traerán se unen los que, ‘espontáneamente’ les aportan, comentan
en el PP jerezano, anónimos informantes que supuestamente simpatizan o militan
en el PSOE. Menudo favor le hacen al
viejo partido del genuino Pablo Iglesias.
Esos se merecen la expulsión inmediata. Punto.
Hace muchos años la agitación y
la propaganda –el agitprop- era
clave en una organización como el Partido
Comunista de España (PCE), ahora lo llaman estrategia, marketing político,
esas cosas en las que cualquiera que hace una web con plantillas de Wordpress, o sabe crear perfiles
sociales para gestionarlos con escaso éxito se vende como gurú de la
comunicación política. Y van y lo contratan. En este terreno cuenta la
formación y la experiencia, sobre todo en situaciones de crisis, que es cuando
más se aprende. No vale cualquiera. Punto.
Ayer pasé calor y dolor, se me
removió el alma. Fue en el funeral del hermano Adrián del Cerro, al pensar que hay 1.300 familias en Jerez que salen adelante gracias al economato que
lleva su nombre, cuyo funcionamiento deberían conocer bien nuestros ediles.
Como lo conoce Santiago Casal, buen
amigo de gran corazón, al que deseo la mejor de las suertes. Hay que revisar el
concepto de pobreza porque el cambio de modelo que nos imponen los neocon está llevando a situaciones
comprometidas, muy duras, a familias que en teoría no deberían tener problema
alguno. Pero la puta crisis ha hecho mucho daño a mucha gente y no es justo.
Punto.
Es de manual. Me refiero a esa movilización a favor de la dotación
y apertura del edificio de radioterapia del Hospital de Jerez, a donde ha llegado un gran profesional, el
doctor Manuel Lubián. Es obvio que
sus promotores tienen razón, que los enfermos viven una situación muy dura ya
para añadir un desplazamiento largo y además con estas temperaturas extremas.
Digo que es de manual porque salta a la vista que detrás hay un partido
político muy concreto. Como no he sido rey mago ni pregonero no le debo nada a
nadie. Soy libre. Pero todo lleva su procedimiento y la estrategia no le
servirá de nada. Esperen y vean lo que ocurrirá. Punto.
Una de las peores cosas que te
pueden pasar en la vida es que te fallen
aquellos a quienes admirabas, que se derrumben todos tus esquemas en este
proceso finito de aprendizaje que es la vida. Si les pasa no tengan miedo en
censurarles y apartarse de ellos y de ellas porque han roto un sagrado vínculo.
En la vida hay que resetear el sistema de vez en cuando, aprovechar esos
momentos tan complicados para dar un golpe al timón, poner velas al viento y
emprender otro rumbo. Lo que tiene bemoles es que algunos lo hagan y luego
censuren a otros que, con enorme dignidad, dan un nuevo sentido a su trabajo y
su existencia. Punto.
En la década de los 90 fui
corresponsal de TVE y Diario 16
Andalucía a la vez en el Campo de Gibraltar y tengo allí buenos amigos y
una red de contactos que me alerta de cualquier novedad. Lo del conflicto de
las aguas territoriales, el narcotráfico (hay más en el lado español, eso lo
sabe cualquiera), el contencioso con Gibraltar, es un clásico. Los gobiernos de
España y el Reino Unido no deberían dejar esto en manos de políticos locales
ambiciosos, Picardo y Landaluce, ni
de medios interesados. Se trata de cooperación sincera por todas las partes,
entre el eficaz SVA y las fuerzas de
seguridad gibraltareñas. Y eso no existe. Punto.
Banda sonora
Leiva me acompaña en las idas y venidas por las calles de Sevilla, Cádiz y Jerez. Me da ese punto
vacilón que tanto necesito ahora mismo, porque no queda otra que tomarse las
cosas con un poquito de sorna y cachondeo ante el ridículo tan espantoso que
hacen tantos.
En mi serie favorita, Scandal (Fox), el padre de Olivia Pope le trae un álbum en vinilo:
Songs in the key of life, de Stevie
Wonder, que pinché en Radio Jerez cientos de veces. Me sé todas sus
canciones y lo he guardado en Spotify para volver a disfrutar ese doble disco,
adorable.
En mi vida siempre hay música, de
todo tipo, pero el rock me puede, una guitarra metálica, un bajo penetrante en
el corazón, días de vino, de rosas con espinas, de penas y felicidad. “Tengo que volver a mi planeta…” Ojalá pronto nos podamos divertir juntos en
la radio. Me apetece al final de cada comentario brindaros algunos párrafos
sobre la música que me gusta. Lo haré. Temas que espero volver a reproducir y
comentar pronto para tod@s. Punto y
aparte.