El duelo por la instalación de Ikea en Jerez es brutal. Muchos se están apresurando ya a comprar terrenos en Jerez y en El Puerto de Santa María, donde tienen reservados 300.000 metros cuadrados para que la gran multinacional sueca no tenga problema alguno en instalarse, decisión que adoptarán en la primera quincena de diciembre. Hombre, no son Kirk Douglas ni Burt Lancaster, pero Pacheco y Gijón libran en la sombra su duelo por el IKEA en el OK Corral, que guarda cierto parecido con el famoso enfrentamiento del sheriff de Tombstone Wyatt Earp y su amigo Doc Holliday con los Clanton, miembros de una poderosa familia de la zona. Las diferencias se dirimirán en un duelo en el O.K. Corral
Este particular duelo al sol no lo libra Pedro Pacheco con el cariacontecido Hernán Diaz. No, ni de coña. El duelo es entre Pacheco y José Gijón Gallego, hoy gerente de la sociedad Impulsa El Puerto (que desarrolla el parque Las Salinas, donde se puede instalar Ikea) y hace algunos años brillante ejecutivo de la Caja de Jerez al que pusieron de patitas en la calle (¿Vendetta de Pacheco por las denuncias que hacía Gijón desde su candidatura al consejo de la Caja?). Nadie lo podrá probar, pero todo apunta a ello. Una época turbulenta que no olvidaremos nunca en Jerez ni en Andalucía, de la que alguien está escribiendo un libro que puede ser un best seller (antes de las municipales, imaginen).
El azar ha querido que ambos sean vecinos en Jerez (puerta frente a puerta). Gijón, desde su puesto en Impulsa, ha convertido El Puerto en un municipio enormemente atractivo para la inversión, ha puesto todos los elementos en el canasto para llevarse el gato al agua. Claro está que el ex directivo de la Caja no maneja los hilos de la Junta de Andalucía. Es en Sevilla donde el PSOE inclinará la balanza. Pero el duelo en el Marco de Jerez es de puta madre.