15 sept 2007

Fiscales como Shark



Lo confieso, si no ejerciera esta profesión bendita y maldita, sería un abogado como Shark (James Woods) en el departamento de justicia de la ciudad de Los Ángeles, otro crisol de culturas en el que las tensiones las generan las rivalidades entre fiscales y abogados. Una magnífica serie de FOX. Shark tampoco habría dejado pasar oportunidades de destapar la verdadera cara de sinvergüenzas sin escrúpulos. Sebastián Stark es un carismático y extremadamente seguro de sí mismo abogado defensor, quien tras el resultado impactante e inesperado que tiene uno de sus casos, decide trasladar sus agresivas tácticas al otro lado de la abogacía: la oficina fiscal. Sus tres reglas son: un juicio es una guerra, la derrota es la muerte; la verdad es relativa, escoge una que te funcione; y en un juicio conjurado, sólo hay 12 opiniones que importan, y la tuya no es una de ellas. Pero, gracias a Dios, algún representante de la ley anda interesado en esos asuntos. Le deseo suerte. Shark (acabo de ver su primer episodio, dirigido por Spike Lee) es un buen tipo, en el fondo, en la forma es tipo que nos falta en España, en el estamento judicial, para que a más de uno, y una, se le congele la sonrisa que a veces luce cuando comprueba su poder y la impotencia de los más débiles. James Wood, el actor, no viaja en avión desde el 11 de septiembre. ¿Que si me he quedado a gusto? Ni te imaginas. Desde 2005 este blog es muy especial. La libertad, querido internauta, cuesta, y ya he pagado algunas facturas. Ahora le toca a otros. La racha mala se abate sobre ellos. Me sentaré en la escalera de mi casa...
Web: Shark