Creo que lo que se avecina en 2008 nos lo están ocultando aunque, si leen EL ECONOMISTA de este fin de semana, sabrán que la tormenta económica perfecta está a punto de abatirse sobre medio mundo. ¿Conejo en Navidad? Hay que ser idiota, tanto como para decirnos que dejamos un euro de propina cuando pagamos dos cafés. Estos del Gobierno o se creen que somos tontos del culo o es que hace tiempo que no ejercen de ciudadanos normales. Dice en El Mundo Eduardo Mendicutti, sanluqueño ácido, que "eso de dar conejo por pavo es como dar gato por liebre..." pero es que el asunto le ha llegado al alma a muchos españoles, que asistimos a un encarecimiento sin precedentes de alimentos básicos como el pollo, la leche, el pan y eso sin contar los problemas bancarios que se están generando en muchas familias. Si ZP no se da cuenta de lo que está a punto de pasar en este bendito país de pacientes y buenas personas, más vale que lo haga, porque en marzo muchos se van a acordar de la bolsa de la compra, de la crisis, de la ruinosa economía familiar. Este Solbes, crecido ante la posibilidad de volver a ser ministro de Economía (cielos) dice ahora que no hemos interiorizado el valor del euro. Y un cuerno, ministro, con todos los respetos, yo siempre recupero las monedas, dejo lo justo de propina y tengo un viejo monedero de piel de Ubrique para guardar la calderilla. Y me importa un rábano que el dependiente de turno arquee la ceja cuando le dejo el botín encima del mostrador ¿Inflación? Sí, pero de idioteces al por mayor. De pena.