Esta Semana Santa da para todo, para recuperar viejas películas. Es lo que he hecho con Trece días, una película histórica, la narración pormenorizada de 13 días que conmovieron un período de la Guerra Fría. Está dirigida por Roger Donaldson, con Kevin Costner, Bruce Greenwood, Steven Culp, Dylan Baker, Henry Strozier, Frank Wood. Actores que se meten en la piel de los Kennedy, y retratan a la perfección lo que pudieron ser aquellos días. En octubre de 1962, aviones espía de los Estados Unidos descubrieron que se estaban instalando en Cuba misiles secretos de la Unión Soviética. A sólo 70 millas de sus costas, los misiles podían tardar sólo cinco minutos en impactar sobre las principales ciudades de los Estados Unidos. Todos los altos mandos del poder político y militar estuvieron en pie de guerra, tratando de manejar una situación que pudo haber llevado a la guerra nuclear. La habré visto cinco o seis veces y siento verdadera fascinación por ella, como por algunos capítulos del Ala Oeste de la Casa Blanca. Por más que miro, ya no, ya no quedan políticos como Kennedy y su fiel secretario particular, su jefe de gabinete, amigo y mejor asesor. Quedan mediocres y pelotas.