El grado de encanallamiento de la vida política en Jerez está alcanzando un límite peligroso pero acaso necesario. El problema es que lo que realmente pasa no se le explica a los ciudadanos con valentía. Lo digo como lo siento. Hay miedo a decir la verdad, es demasiado fácil hacer amigos y, créanme, eso de la amistad es algo muy especial, y está en vías de extinción. Además, nunca se llevaron bien dos especies que comienzan por 'p': periodistas y políticos. ¿Se han fijado? también empiezan por 'p' putas y policías. Todos son oficios admirables, se ejercen por vocación, nadie está por obligación en ellos. Ayer, un promotor, Antonio Romero-Haupold, que sueña las cosas y las hace realidad (me refieron a Kinética) le regaló en mi presencia un libro a Pilar Sánchez, la alcaldesa de Jerez: "El origen de las especies", de Charles Darwin. Me quedé mirándola y ella lo hojeó levemente. Igual lo lee en un momento de reflexión. Pilar es una outsider, ha ganado contracorriente, a los que siempre vienen ganando en su partido, por eso no se puede equivocar en nada. Le miran demasiados ojos. Y manda cojones, que estos día algunos gaznápiros de su partido, bien apoltronados, ni siquiera hayan movido una ceja por ella, por muchas ganas que le tengan o por muy grande que hayan podido ser su errores, que están por ver. A mi modo de ver ha cometido tres, de libro. El primero nombrar jefe de gabinete a una persona que aprecia y que bien hubiera estado muy bien de asesor, a su lado, como lleva algún tiempo. Es como ponerle una diana en la frente, con las ganas que le tienen en la oposición y algunos foros. El segundo es no darse cuenta que el Ayuntamiento de Jerez tiene muchas goteras, filtraciones y que hay mucho funcionario que se cree que los ciudadanos estamos a su servicio, y no al contrario, que infringen las más mínimas normas de lealtad, discreción y profesionalidad exigibles. El tercer error, más grave aún, es no planificar con rigor y seriedad su hoja de ruta política. Actuar por instinto, a bandazos o a remolque hace que cualquiera termine mal, muy mal. En todos los partidos hay cobardes y el PSOE jerezano, que conozco muy bien desde hace años, tiene el mal en sus entrañas: el cainismo. A Pilar Sánchez le estallan los problemas justo cuando su partido reparte cargos en los congresos, pero el objetivo real de sus enemigos es hacerle daño en octubre, en su congreso local. Mal que le pese a Pizarro y a Cabaña, la regidora jerezana ganó por mayoría absoluta. Ponerle chinos el camino o mirar hacia otro lado cuando le caen chuzos de punta es muy ruin, sobre todo cuando basta repasar las hemerotecas para comprobar que han defendido a compañeros que luego, con el tiempo, han resultado ser un fiasco monumental. Cada vez me gusta menos la política, al menos la que me rodea. Acaba con las personas, con las ideas, con la ilusión de quienes defendemos aún que es posible un mundo mejor. Y nos negamos a cambiar. Ayer hablé un buen rato con Pedro Rollán, el director de Onda Jerez TV y una de las personas en las que confía Pilar Sánchez. Y le transmití nítidamente, como no puede ser de otra forma, la necesidad de hacer "otra" radio y "otra" televisión en Jerez, siguiendo modelos que contagien valores y tolerancia, más pluralidad y valentía a la hora de exponer lo que pasa en la ciudad. Onda Jerez tiene una capacidad de fuego (lamento el término militar) superior a cualquier medio de comunicación de la ciudad pero ¿se usa correctamente? En mi opinión hace falta aire fresco en la radiotelevisión pública jerezana, menos botafumeiro, más inteligencia y, llegado el momento, ser más didáctica y valiente, practicar la memoria histórica sin miedo. Comprendo que las nóminas son las nóminas, pero si Pedro se fija en el modelo de su Canal Sur aviados estamos. Basta con que eleve la mirada y se fije en RTVE. Ese modelo necesita, por otra parte, de profesionales que lo sean y de políticos que confíen. Y en ese modelo sobran asesores que dicten escaletas. Pedro me dice que sabe lo que tiene que hacer. Yo no lo tengo claro. Tendremos que hablar más sobre estos asuntos, porque sé que le preocupan como profesional. No pensaba que este comentario iba a salir así, debe ser el calor insoportable, el insomnio de las dudas y la ilusión por los cambios. No lo sé, pero me da igual. La canción es de Bob Seger: "Wait for me". Rock, nunca falla para el alma, ajada por los palos que nos da la vida. Rock, para mantenerse firme ante la mediocridad. Y para llevarlo en el coche, en noches de insomnio, de furia o de amor. Siempre rock. Mi medicina.