La impresión que muchos tenemos es que el Gobierno ha creado la polémica de los chiringuitos para acallar el tremendo rumor político generado por su derrota electoral en las europeas. ¿Que no? Pues entonces el departamento de Elena Espinosa está demostrando su poca habilidad, porque tiene en pie de guerra a un sector que, solo en Andalucía -la tierra del chiringuito playero- mantiene a 40.000 personas y factura más de 500 millones de euros. Pero hoy, al escuchar a la diputada Mamen Sánchez en Onda Cádiz RTVI, creo que las cosas se están reconduciendo. Antonio Galván, de la Federación Andaluza de Empresarios de Playa, ha expuesto con crudeza y al detalle la situación, mientras que Antonio María de Ceballos, presidente de Horeca, ha reclamado un cambio de la Ley de Costas de 1988. La inoportunidad de la polémica es supina.
El Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino informó hoy de que a finales de este mes pretende presentar el conjunto de propuestas formuladas así como la situación del proceso de diálogo que está llevando a cabo con los empresarios y las administraciones competentes para solventar la situación en la que se encuentran los chiringuitos de Andalucía. En este sentido, manifestó que la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y del Mar está realizando un análisis detallado de cada tramo de la costa y de la situación de los establecimientos con el objetivo de determinar las propuestas necesarias para adaptarse a la normativa existente. Así, señalaron en un comunicado que las propuestas se refieren a los títulos de ocupación de los establecimientos, su ubicación -atendiendo a las circunstancias del tramo de costa- y la ocupación del dominio público marítimo terrestre. Esta información se hace pública tras la polémica suscitada por la situación de muchos de los chiringuitos del litoral andaluz, la mayoría de ellos en la Costa del Sol, y la demanda de hechos concretos por parte de los empresarios de playas andaluces, que denunciaron la situación de incertidumbre que están padeciendo, más aún "con la temporada alta encima".