28 may 2011

Nuevos tiempos, nuevos retos


Me he levantado temprano, un buen desayuno con amor, preparando al detalle lo que vendrá, aunque caben sorpresas agradables de última hora (no dependen nunca de uno). Esta madrugada llovió fuerte, lo suficiente para limpiar de miasmas el ambiente, y dar alegria a quienes confiamos, deseamos y soñamos con un mundo mejor cada día. Sigamos peleando, duro y a la cabeza. Es un plan simple, como este grupo: trabajar sin miedo. Y no dejar que los mediocres ganen batalla alguna, hay que laminarlos sin piedad. Ellos no la tienen. Que les vayan dando de uno en uno. Y una.