Juan Martín, hasta hace unos días gerente del Parque Metropolitano de Los Toruños, bajo cuya responsabilidad ha alcanzado cotas excelentes de calidad en la gestión, es el jefe de gabinete del subdelegado del Gobierno en Cádiz, Sebastián Saucedo. La marcha de éste, prevista para agosto, solo tiene que ver con su edad y profesión, ya que la normativa docente le permite jubilarse de acuerdo a la Logse, según me explicaron ayer. Dicho queda. Otra cosa es que su forma de llevar la subdelegación, demasiado gris y poco mediática, no guste a determinados representantes del partido socialista. Veremos quién viene y cómo enfoca su gestión. Saucedo ha preferido el silencio, coordinar, trabajar sin estridencias. Es su opción. Pero los tiempos que vienen exigirán otro estilo, no mejor, sino otro.
Regresando a Juan Martín, la verdad es que puede sentirse muy orgulloso del trato del equipo humano que ha tenido bajo su responsabilidad, porque ayer le brindaron una cariñosa despedida-almuerzo (pagado a escote por todos los que asistimos) en la que no faltó de nada, sobre todo la emoción. A sus 34 tacos, Juan tiene ante sí una espléndida carrera política, nacida gracias al apoyo valioso que siempre le brindó el actual delegado del Gobierno en Andalucía, el sanluqueño Luis García Garrido, uno de los asistentes, junto a periodistas, como Francisco José Román (SER), Vicky Medina (CS), Eduardo Albadalejo, la parlamentaria andaluza María Cózar, el ecologista Juan Clavero, el delegado de la Junta Pablo Lorenzo, y hasta el alcalde de El Puerto, Enrique Moresco y su edil de Patrimonio. Un momento grato que me alegro de haber compartido. Hasta la cantante Clara Montes y el cocinero Ángel León.
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