Danza Invisible -
Les conozco muy bien a los cuatro. Y tiene tela la foto de Manolo Fernández. Javier Arenas ha vuelto a la corbata y los trajes serios porque se ve ya como presidente de la Junta de Andalucía. Antonio Sanz, más inaccesible por días y acumulando, como es costumbre en él, toda la información posible para su labor diaria de oposición al PSOE. Sanz y Arenas mantienen una relación respetuosa con Teófila Martínez por muchas razones, pero no son uña y carne con la regidora. Nunca lo han sido.
A Pepe Loaiza le ha ido bien 'ser de Arenas', ahora tiene un pacto de gobernabilidad en San Fernando con el PA, es el presidente de la Diputación de Cádiz, el presidente del PP y hasta dentro de unos días, parlamentario andaluz, cargo que abandonará para dejar paso a otro compañero. Loaiza es un hombre de Arenas pero también respeta, y mucho, a Teófila Martínez.
Ignoro el tenor de la conversación, pero habrá estado entre los juegos florales y la esgrima más fina. Los cuatro saben que no pueden caer en el error de la prepotencia, hay demasiadas ilusiones puestas en la alternancia, de miles y miles de andaluces que quieren salir de las listas del paro y de una crisis en la que no se le hace frente a quienes la han creado. Pero a su alrededor hay pirañas, tiburones y coyotes, anhelando el poder. Será un placer ir contando sus peripecias, aventuras y decisiones, a este lado de la carretera.