Imáginense que esta página tuviera la capacidad de recoger los votos y las opiniones de millones de españoles. Y que todos ellos me dieran autorización para usar sus opiniones y trasladárselas a ZP en forma de encuestas y respuestas masivas a asuntos de gran actualidad. Política on line. Que yo pudiera mandar sus votos donde realmente pudieran influir, directamente al presidente del Reino de España, Mr. ZP. Imagínense que el Katrina se hubiera abatido sobre España y le quisiéramos echar la culpa al pobre ministro del Interior, José Antonio Alonso, tan capaz él. Bastaría con hacer una pregunta: ¿Sería usted partidario de que ZP cese fulminantemente al ministro Alonso por su inexperiencia en abordar la crisis del Katrina en España? ZP a salvo. De nada, gracias. Lo mismo que Morris hace con Michael Brown el inexperto funcionario responsable de actuar ante catástrofes como la del huracán Katrina. El chivo expiatorio de Bush ¿Y si me cayera Michael Moore como una patada en salva sea la parte? ¿Y si yo tuviera una web potente con 1.700.000 españoles dispuestos a opinar cuando yo les consulte? ¿Haría un DVD contrarrestando a Moore? Usaría tan tremendo poder. Claro que sí. Lo mismo que hace Dick Morris, ex asesor del ex presidente de los Estados Unidos, Bill Clinton, con su web www.vote.com . Coño, por imaginar que no quede. Un momento, me llaman al móvil. ¿Si? ¿Como? ¿Que cuanto vale esto que cuento? Vale, vale, hablamos. Uy, me dejé el micro abierto.