Los chicos del maíz creen que Rafael Román, diputado y concejal de Cádiz, es el mejor candidato a la alcaldía de Cádiz, donde hoy gobierna Teófila Martínez (PP). OK, que muestren las encuestas y eso de que están a seis concejales. Yo he sufrido, aunque mínimamente para su pesar, el "estilo" del personaje (aunque reconozco que me ha pedido disculpas ), cuya frágil memoria histórica (le puedo recordar algunas de las movidas internas del PSOE gaditano) es solo comparable a su cainismo contra el PP y cualquier cosa o persona que se sitúen a su alrededor.Román, "de momento", es "lo mejor" (lean hoy Diario de Cádiz) que tiene el PSOE para enfrentarlo a Teófila Martínez, una alcaldesa peleona (más de uno temblaba en Madrid cuando, durante el Gobierno de Aznar, entraba por los despachos), de carácter difícil, incansable y más cercana a la gente de lo que los socialistas desearían. Y conste que Román, en el fondo (vale, lo admito, muy en el fondo) no me parece una mala persona. Otra cosa es que sea un político moderno, al estilo de Borrell (!como curte Europa!) abierto y dialogante. Si Román quiere ser algo un día en Cádiz tiene que abandonar el camino de la porquería, si bien es cierto que en el PSOE -que actúa más como una empresa que un partido- de mierda saben un rato, aunque en la organización hay una gruesa mayoría de buenas gentes, inocentes de lo que otros hacen. Políticos que aún guardan la compostura en público y en privado.
En estos días han llegado a mi mesa, sin demasiado esfuerzo por mi parte, episodios realmente rocambolescos y recientes de algunos personajes del PSOE gaditano, cuya historia conozco muy bien porque formé parte de ella. Episodios que han sido guardados en el cajón por algún periodista gaditano, sin ganas de complicarse la vida. Hubo una vez, en la historia de nuestro país (que no es federal ya por la cobardía de Felipe) en la que muchos nos creímos aquel magnífico lema de campaña "por el cambio", en aquella etapa tan especial de España, hasta que descubrimos que algunos "compañeros" de viaje tenían la manita demasiado larga y la moral muy cortita. Unos optaron por quedarse e hicieron lo que pudieron. Otros nos dimos el piro para destapar la mierda calentita de un buen grupito de corruptos. Las hemerotecas, como el algodón, no mienten.
Todavía recuerdo, con nitidez, aquella campaña electoral de 1982. Pepe Lodeiro, periodista gaditano hoy "abandonado" por el PSOE (creo que está en Madrid) era el jefe de prensa del PSOE en Cádiz, Juan Pedro Simo (hoy en Diario de Jerez) y yo colaborábamos como técnicos en Jerez.
Fue una campaña realmente increíble, la del 82, que ganó Felipe González. Cada día a través de un ingenio llamado "dex" (precursor del fax) mandábamos 100 datos en un formulario a Madrid, donde Helga Soto y Alfonso Guerra los procesaban para que Felipe, a las 13,00 horas, ofreciera una suculenta rueda de prensa a bordo del bus electoral. No se pueden imaginar (eso lo dejo para el libro que ando escribiendo en éstos últimos meses) el tipo de preguntas que, a diario, teníamos que contestar. Certeras y muy útiles.
Tras la muerte de Franco, el PSOE consiguió dar una imagen de juventud, de dinamismo, de capacidad de organización, de aceptación internacional, que hizo que la mayoría de la población acabra identificándolo con la oposición al régimen. Ahí colaboramos muchas personas. Pero el cuento cambió mucho pocos años después.
Yo no sé donde coño estaba Román, ni me importa, lo confieso, pero yo estaba participando en uno de los procesos electorales más apasionantes de la historia de España. Muy joven, me empleé a fondo contra la dictadura y tengo mi ficha policial (gracias a un comisario ya desaparecido) como "trofeo". Lo hacía con personas que entonces eran amigos y hoy lo siguen siendo.
Escribo ésto sin acritud (que diría Guerra) para que Román lo guarde con cariño y nunca más vuelva a descalificar a personas honestas, luchadoras y democráticas que creyeron en unas ideas hasta que todo se pudrió. Entonces, como diría Van Morrison, me puse "a este lado de la carretera". Otro día, cuando me salga de los cojones, les contaré lo mucho que sabe Román de dossieres en su partido. Se me olvidaba, pese a todo tengo un gran respeto por aquellos que me representan como ciudadano, tal el caso de Román en el Congreso y el Ayuntamiento de Cádiz. Pero el respeto desaparece cuando alguien lo pierde primero. Así que. ..
Pero a Dios pongo por testigo, que diría Scarlett O'Hara, que nunca más aguantaré las críticas de aquellos que atacan a personas sin importarles dañar irreparablemente su reputación profesional. Desde el 28 de agosto, este blog es un espacio diario de libertad, un recurso que recomiendo a cualquier persona que quiera tener su propio medio de expresión. No soy enemigo de nadie, pero selecciono cuidadosamente a aquellos con los que me relaciono. Román quiere quedar a almorzar un día conmigo. Eso me dijo el otro día, tras su comparecencia el vergonzoso juicio de Osuna (al que asistí como público, abochornado). Nos dimos la mano y convinimos en quedar un día.
Vale, pero antes pasaremos el arco detector, procuraremos que sea en un lugar conocido y cada uno pagará su cuenta. Luego redactaremos unos puntos comunes para que lo que contemos a terceros sea coherente y se atenga a la verdad. Ah, no suelo beber, si acaso un tinto de verano. Cuando quiera, don Rafael. Al final, más tarde o más temprano, tendremos que mantener una relación normal, entre periodista y político, pero sin descalificaciones ni mentiras.
Y hablaremos de dossieres, y de reuniones secretas en Miami (la de Cádiz), en la Zona Franca, en restaurantes, hoteles, incluso en casa de algunos próceres socialistas, y de los clanes. Hablaremos de lo que quiera. Cádiz es un pueblo y se sabe tó. Y quienes más hablan son aquellos que más parecen quererte, Rafael. Ten cuidado con los chicos del maíz, porque estás metido en el maizal. Yo procuro tener esa misma actitud de precaución, pero que no te quepa duda que voy a hacer bien mi trabajo por encima de todo y de todos. Un saludo, querido diputado.
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NOTA ENVIADA HOY A LOS MEDIOS POR EL GABINETE DE PRENSA DEL AYUNTAMIENTO:
EL PP SE ALEGRA DE QUE ROMÁN SEA ELEGIDO CANDIDATO PORQUE DEMUESTRA QUE “EL PSOE NO QUIERE GANAR LA ALCALDÍA DE CÁDIZ”
El portavoz socialista es “un candidato fracasado, sin talante y sin talento” al que sus propios compañeros de partido pretenden decapitar políticamente
El equipo de Gobierno del Partido Popular en el Ayuntamiento de Cádiz se mostró hoy “muy satisfecho” por el hecho de que los socialistas apuesten por Rafael Román como candidato del PSOE a las próximas elecciones municipales, ya que ese hecho demuestra que el principal partido de la oposición “no quiere arrebatarle la Alcaldía de la ciudad a Teófila Martínez”. A juicio de los populares, es motivo de “alegría que vayan a designar a un candidato fracasado, sin talante y sin talento, al que sus propios compañeros de partido pretenden decapitar políticamente”.
El PP de Cádiz mantiene que “esta designación de Román como candidato está basada en el hecho de que socialistas como Rafael Barra y Pablo Lorenzo no quieran asumir la candidatura, habida cuenta de que los propios socialistas saben del castigo al que los Gobiernos de Rodríguez Zapatero y Chaves tienen sometida a la capital gaditana. Valgan como ejemplos que los socialistas han eliminado de un plumazo su inversión en el Paseo Marítimo de Puntales-La Paz, dejando a Cádiz con 800 millones de las antiguas pesetas menos, que habría que sumar a otros 800 que deberían haber invertido en la actuación urbanística del Baluarte de San Roque, y a los 1.000 millones de las antiguas pesetas que no quieren invertir en la ciudad para las mejoras del Mercado Central”.
Además, este “magnífico currículum de los socialistas en la ciudad de Cádiz se sigue engrosando con la paralización del proyecto de la Plaza de Sevilla, con el retraso en tres años del proyecto del Segundo Puente, con el olvido al que tienen sometido al proyecto de la Ciudad de la Justicia, con la negativa a alcanzar convenios en materia de vivienda con el Ayuntamiento, con la eliminación de la Policía de Proximidad y con el albergue juvenil, del que nunca más se supo”.
El equipo de Gobierno añade que “ahora el PSOE tiene otro logro más en la ciudad: intentar ningunear a una institución elegida democráticamente por los gaditanos como es el Ayuntamiento de Cádiz en la proyección de la ciudad de cara a la conmemoración del Bicentenario de la Constitución de 1812”.
Mientras tanto, el equipo de Gobierno recuerda que todos estos proyectos recibieron el impulso y el apoyo, además de compromiso económico del Gobierno de José María Aznar”.
Por lo tanto, con todos estos “castigos a los que tiene sometido el PSOE a los gaditanos, es más que comprensible que no puedan tener a la ciudad de Cádiz como una prioridad de cara a las próximas elecciones municipales, puesto que la tienen abandonada”.
Asimismo, el equipo de Gobierno en el Ayuntamiento gaditano destaca que “Román no va acompañado por ningún logro, sino todo lo contrario, y ahora, que podría verse respaldado por el Gobierno de la nación, gestionado por sus mismas siglas políticas, lo único que vemos en Cádiz es que no traen inversiones para la ciudad, paralizan todos los proyectos donde debería existir una colaboración entre administraciones, y siguen maltratando a la Bahía en materia laboral, llevando al paro en los astilleros a 4.000 trabajadores”.
Los populares insisten en que “ese es el expediente político de Román y su partido para presentarse a las próximas elecciones y los gaditanos lo saben”. Por tanto, y tal y como reconocen en privado algunos dirigentes socialistas, se va a utilizar a Román para “para que se termine de quemar a nivel político. De esta forma, y ante lo que supondría su segundo fracaso en las urnas, estaría justificada su jubilación política anticipada”.
Esta estrategia, considera el Gobierno local, ya la utilizaron con la anterior candidata, María de la O Jiménez, “quien tras apartarla de la delegación provincial de Salud, la engañaron al prometerle un puesto en las listas al Parlamento andaluz, si fracasaba, y sin embargo, después la dejaron en el paro y no cumplieron con su compromiso”.
Ahora, el PSOE, con su secretario provincial, Francisco González Cabaña a la cabeza y junto a las familias políticas de Perales y Pizarro, pretende repetir esta ecuación: los socialistas dejaron a Rafael Román sin el coche oficial de la Diputación de Cádiz para encargarle el cometido de ganar la Alcaldía de esta ciudad. “Pero, cuando fracase otra vez en las urnas, lo utilizarán de nuevo para que no exista ninguna excusa y lo puedan apartar definitivamente del panorama político de la provincia y de la ciudad. Los socialistas no quieren ganar en la ciudad de Cádiz, sólo quieren eliminar políticamente a Román, un candidato que en este mandato sólo se caracteriza por su ausencia y su crispación”, añaden los populares.
El equipo de Gobierno en el Ayuntamiento de Cádiz afirma además que Román sigue acompañado por esa sombra de haber sido un dirigente socialista, que en ocho años que gobernó la Diputación, “lo único que hizo por Cádiz fue pintar de color rosa el Palacio provincial, favorecer a Jerez y Algeciras, olvidar a la capital y no invertir en los gaditanos ni un duro de los cerca de 250.000 millones de las antiguas pesetas, que gestionó durante esos ocho años”.
Cádiz, a 15 de octubre de 2005
