30 jul 2016

Al hilo de la boda de Inés

Desayuno con El Periódico 7


Es la novia de España, claro que sí. Inés Arrimadas, jerezana, catalana y española, se casa hoy a la fresquita, entre las siete y media y las ocho de la noche, con Xavier Cima. Todo bien salvo esa extraña ley del silencio, del estricto complimiento de una confidencialidad que añade más morbo a todo lo que rodea la boda.
Un enlace civil, el triunfo del amor sobre la mala política, un buen tipo este Xavier Cima, envidiado por tuiteros que desechan ya cualquier oportunidad de casarse con Inés. La red destila mucho machismo, se nota que jode, y mucho, que Arrimadas sea guapa, valiente, rápida, inteligente, que esté formada y sea creativa, y la mano derecha de Albert Rivera. 
Pero lo que remata a los mediocres ultracatalanistas y a parte de la caverna es que haya seducido tanto a Cima para que éste abjure de principios que separan a personas pero no, al menos, en su caso con Inés, a dos corazones entregados. ¿Por qué jode tanto la felicidad en este país nuestro?
Es lo que siento al hilo de este asunto, amén del cabreo profundo que tengo -como otros compañeros- por la omertá impuesta sobre el enlace a todo ser relacionado o no con el evento. Su boda es un hecho relevante como los de la CNMV porque ella ha triunfado, con amor, sobre el independentismo rancio. En este caso la política no ha vencido al amor, sino al contrario. Esta canción para los novios. Solo hay una vida por vivir, adoro tanto a India Martínez. 

Hoy vamos de boda: se casa @InesArrimadas


“Mi hija me ha dicho que no hable con la prensa” es lo máximo que se atreve a afirmar Rufino Arrimadas, el padre de la novia, que abre la puerta de su casa a LOC con cara de preocupación. De fondo suena “Camino de rosas”. La banda de Alejandro Sanz ensaya a las tres de la tarde bajo un sol de justicia, en el Estadio Chapín (ayer la gira pasó por Jerez), a 300 metros de la residencia de los padres de Inés Arrimadas (35 años), que hoy contraerá matrimonio en la ciudad gaditana en una ceremonia civil, con el político ex convergente Xavier Cima (38). 

“Yo le entiendo a usted” dice Rufino Arrimadas, “pero no puedo decir nada”, tras lo que estrecha la mano del periodista y cierra la puerta de la vivienda. La finca de la boda, la bodega del profesor Luis Pérez, es espectacular, a sus pies cuidados viñedos, al fondo, el perfil de Jerez de la Frontera, la tierra natal de Inés Arrimadas. El que disfrutarán los invitados al evento, del que se informará hoy “por igual”, según fuentes de Ciudadanos.