Uno de los pasaportes que salvó la vida a su titular.... |
Eran funcionarios del régimen franquista y buenas personas, como lo son la mayoría en España, aunque una casta de impresentables, en cada gobierno, adictos al trifásico, les haga aparecer como lo contrario. Me ha encantado la historia, las vidas de nombres de Eduardo Propper de Callejón, Ángel Sanz-Briz, Sebastián Romero Madrigales, Bernardo Rolland de Miota, José Rojas Moreno, Julio Palencia o José Ruiz Santaella. Fue en la década de los cuarenta. Eran diplomáticos, que podían haber salvado su culo muy fácilmente, pero que se complicaron la vida y la arriesgaron por causas nobles, en tiempos duros. Estaban destinados en distintos puntos de Europa -Hungría, Francia, Rumanía, Bulgaria, Grecia, Alemania...- que servían a los intereses de aquella España de Franco.