En la lejanía creo apreciar que las campanas repican, pero no es por este comentario. Raras veces coincido con Fernando Santiago, el presidente de la Asociación de la Prensa de Cádiz, pero su comentario hoy en el periódico El País está lleno de algunas verdades completas y alguna a medias, como es habitual en Fernando. Arremete contra los de IU que gobiernan en Chiclana y dice que antes no estaban a favor de la regularización. Fernando está algo mayor, porque los tres ediles de IU-CA, que se muestran demasiado comedidos ante lo que van conociendo, estaban a favor de la regularización. No veo a Fernando escribir sobre la responsabilidad de los distintos alcaldes que, desde 1979, ha tenido la ciudad. Eso sería meterse directamente con el PSOE y eso es pecado, pecado...Lo que no sabe Fernando es que en la dirección socialista no van a dar mucha estopa al gobierno cuatricolor chiclanero porque lo que desean de corazón es que el asunto se arregle y no se haya depuración de responsabilidades. Teniendo el asunto de La Línea entre los dientes, quién quiere morder a alguien para pillar la rabia. Eso es Chiclana, un bocado peligroso.
La campaña se antoja interesante y, por lo que sabemos algunos periodistas parece que algunos dossieres por uno y otro lado están preparados. Será lo de siempre, mierda para dar y tomar, que raras veces tiene una influencia en el sentido del voto. Es el caso hoy de Pepe Loaiza, presidente provincial del PP, quien cree ver un retraso en todo lo del proceso de formación de Delphi con el PSOE detrás para que no le perjudique el asunto en las próximas elecciones. Loaiza debe cambiar de asesores porque si se detiene un momentico se dará cuenta de que el PP se ha quedado solo en sus posiciones sobre Delphi y que pese a todo el ruido armado poco ha influido en las elecciones municipales. Loaiza debe ahondar más en si realmente las inversiones y empresas anunciadas van a venir o no. Los sindicatos miran hacia la Junta y el PSOE. Les funciona la brújula.
