30 abr 2009

Emilio Morenatti, fotoperiodista



No teNegrita pierdas su exposición, en el Castillo de Santa Catalina (Cádiz), sobre la violencia de género. Emilio Morenatti, fotoperiodista, pasa unos días de descanso en Cádiz antes de volver a Pakistán. La imagen es de otro fotoperiodista gaditano: Cata Zambrano.  Conozco desde hace muchos años a la familia Morenatti, porque cuando hablamos de ellos hemos de referirnos siempre a su familia, buena gente. Miguel Ángel, hermano de Emilio, trabaja en el AS y en agencias, es un fuera de serie. Emilio ha contado hoy, con la cervecita en La Caleta con Julio González y Fito Carreto, detalles de su vida y trabajo como responsable de fotografía de AP en Pakistán. No es fácil el trabajo allí, no lo es cuando uno se lo toma como debe ser. Violencia de Género, producida por el Centro Andaluz para la fotografía, retrata los efectos de los maltratos que han sufrido quince mujeres pakistaníes, objeto de agresiones con ácido. Morenatti saca a la luz hechos que en algunos casos supera los peores presagios de hasta dónde puede llegar la barbarie humana. En su búsqueda por las grandes ciudades de Karachi o Lahore, pasando por las zonas más rurales de Pakistán, Morenatti conoció las historias de estas mujeres, normalmente jóvenes, bellas y pobres, que pagaron con sus rostros desfigurados disputas entre familias, dotes matrimoniales insuficientes o el rechazo de pretendientes despechados. 
El fotógrafo se gana su confianza para destapar una realidad que hasta el momento habían preferido mantener en la intimidad.  El resultado es demoledor y cada foto constituye un documento de denuncia social que podrá visitarse hasta el próximo 31 de mayo en el Castillo de Santa Catalina, con motivo del I Festival Internacional por la Libertad de Expresión organizado por la Asociación de la Prensa de Cádiz. Mi paisano se ha convertido en el primer español en conseguir el primer puesto en la sección Periódico del certamen estadounidense Pictures of the Year International (POYI) por su trabajo de un año desarrollado en Pakistán, y el Ayuntamiento de Jerez aún no le ha felicitado por ello. Y no será porque allí no leen este blog, una pasada oiga.