1 jun 2012

Fernández en Morón


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El Centro Penitenciario de Morón de la Frontera, Sevilla II, tiene a un recluso que, de momento, es el eje de la investigación que, sobre la concesión de ayudas a expedientes de regulación de empleo por parte de la Junta de Andalucía, lleva a cabo la jueza sevillana Mercedes Alaya. Se llama Antonio Fernández y fue consejero de Empleo. No recibe visitas excepto de su familia directa, y quienes saben algo de él comentan que echa de menos más de un comentario de comprensión, no ya de apoyo, de más de un personaje antes cercano al ex consejero y que ha compartido no pocas fotos y acciones. Excepto un inoportuno manifiesto, en medio de la sempiterna guerra interna del PSOE de Cádiz, pocos han elevado una voz para, en tono humano, enviarle algo de ánimo a Fernández, que no es Bin Laden.
Según la Guardia Civil, durante nueve años desde 2001 la Junta utilizó un sistema de "adjudicación irregular de ayudas que de manera injustificada sustituía la legislación aplicable" e impedía su fiscalización, en una situación en la que el Consejo de Gobierno "conocía el sistema utilizado, participando en mecanismos que lo harían viable". Eso publica hoy El Mundo de Andalucía.
Dice EL PAÍS que después de 14 meses de trabajo, los auditores de la Cámara de Cuentas han culminado un anteproyecto de informe que relata el caos que reinó durante una década en la Dirección General de Trabajo. Y las cifras disparan todo lo conocido hasta ahora sobre el polémico fondo. ¿Qué significa? ¿Por qué la jueza ha parado de golpe su calendario de comparecencias? ¿experimentará el giro esperado el caso y se elevará a otras instancias judiciales?¿saldrá de prisión Fernández?
Todo apunta a que Fernández quizás no se 'coma' el marrón solito. Si el sistema era conocido, ¿acaso Fernández no sería, supuestamente, una pieza del hipotético engranaje? Poco se sabe de él en las calles de Jerez, por donde se pasean amigos, ex amigos y más de uno que no quiere que ahora se le relacione. El recluso Fernández recibe algunas cartas manuscritas de los pocos que se atreven a enviárselas y a mano también las responde, ya que carece de ordenador o máquina de escribir. Para muchos es como si hubiera desaparecido, pero, como en la famosa serie de La Sexta, se sabe que es "una persona de interés". Ha organizado sus asuntos externos y quizás espera acontecimientos...(leer ABC)

Buenas tardes y buena suerte.