10 ago 2012

Seguimientos en las redes...


No hay nada tan tonto como un asesor de comunicación baboso e inútil, pero peor es un lamebotas o lamezapatitos, según el caso, que está permanentemente escudriñando las redes sociales para ver qué hacemos o con quien hablamos y el grado de complicidad, los amigos, seguidores, a quién seguimos. A mí, la verdad, me da igual pero me ha llegado que a algunos y algunas les viene de fábula que el jefe maquiavélico de turno llegue casi al orgasmo al descubrir que determinada persona hace, dice, habla o se relaciona con quien le da la gana. Y si el cabroncete tiene poder, te termina jodiendo... Una vez, una infeliz política le dijo a un veterano periodista: "Tú no te puedes relacionar con esos, son el enemigo y menos hablar con ellos en las redes sociales". Una soplapollez supina. Este planteamiento, más que fascista es cortito de café, de ameba.  Pues bien, esas prácticas de seguir y espiar lo que hacemos en las redes sociales los seres humanos libres le va a proporcionar un grave disgusto a algún lamebotas y una lamezapatitos.