Ayer lo publicaba El Mundo de Andalucía. Cunete vuelve a ser actualidad. No hay distintas versiones. Solo hechos justiciables, la clara historia de un intento de soborno, según la providencia de la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Cádiz. Hace seis años, un concejal del PP de Sanlúcar, Manuel Ramírez “Cunete” recibió una oferta: 50 millones de pesetas y dos billetes de avión a Lisboa, y así podría ver con su esposa el partido Oporto-Real Madrid, y estar ausente del pleno municipal donde, el 19 de octubre de 1999, se iba a votar una moción de censura contra el entonces alcalde socialista Agustín Cuevas Batista, hoy empresario del sector de la construcción. El 22 de octubre de aquel año, Cuevas afirmó que no se iba a comer solo “el marrón”. Parece que sí. Otro alcalde socialista, el de la cercana población de Chipiona, Luis Mario Aparcero, ofreció al edil popular un puesto en el Ayuntamiento de su localidad, le entregó un contrato en blanco estampando en él el sello de la Alcaldía-Presidencia, y firmando Ramírez una nota dirigida a la prensa explicando su postura en la moción prevista y un documento comunicando al alcalde y al secretario del Ayuntamiento de Sanlúcar su pase al Grupo Mixto. Además, le aseguraron un puesto (del 2 al 5) en la candidatura del PSOE de Sanlúcar a las elecciones municipales de 2003. Todo atado y explicado ante el previsible escándalo político en una ciudad que nunca ha tenido estabilidad municipal desde los tiempos del comunista José Luis Medina Lapieza. Sin embargo, el 17 de octubre, “Cunete” había puesto todos los hechos en conocimiento de su partido y del Juzgado de Instrucción Número 4 de Cádiz, donde el día 18 depositó parte del dinero (2.490.000 pesetas y una letra de cambio por valor de 4 millones) y todos los documentos antes citados. Por extraño que parezca, y pese a disponer de veinticuatro horas, las autoridades no ordenaron a la Policía ó a la Guardia Civil que acudieran el 18 de octubre al camping de Chipiona, donde tres de los acusados –los entonces alcaldes Cuevas y Aparcero y el concejal Rafael García Raposo, dirigente sanluqueño del PSOE- protagonizaron el intento de soborno de Cunete. De haber sido más rápidos en la respuesta policial y judicial, todos los acusados habrían caído con las manos en la masa. Es una de las dudas de este caso. Todo lo contrario que en Camas (Sevilla), donde la Policía ha intervenido activamente en destapar la trama inmobiliaria. Ahí lo ven, esperando lo que venga con pose de novillero en el taurino Hotel Jerez. Todavía queda gente como él. La cita, en la Audiencia Provincial el próximo 11 de enero. Con jurado.