Se puede decir más alto, pero no más claro. El Defensor del Pueblo Andaluz, el cura José Chamizo, simplifica lo que está ocurriendo en Ceuta y Melilla: "La gente tiene hambre y tiene derecho a comer en cualquier lugar del mundo". Chamizo se pregunta las razones por las que no se hacen "otras cumbres" y por qué "no funciona la ONU". Las mismas preguntas que nos hacemos todos, todos los días de nuestra vida. Sin embargo, a las preguntas de cura campogibraltareño -otrora azote del narcotráfico en Andalucía- uniríamos muchas más. La primera es cómo es posible que se produzcan esas avalanchas. Me gusta hoy el reportaje de Juan Carlos de la Cal, con fotos de José Ferrer, que publica el suplemento Crónica, de EL MUNDO. Pero regreso al principio. ¿Derecho a comer? Claro que sí.