Pedro Ingelmo y David Fernández son dos excelentes periodistas que trabajan en el Diario de Jerez. Desde este pasado domingo, pueden apuntarse un buen tanto. Para quien no lo sepa en España, desde tiempo inmemorial, el poder y la influencia de Pedro Pacheco, alcalde desde el 1979 y hoy primer teniente de alcalde en un insólito gobierno de coalición con el PSOE (del que ha dicho las más tremendas barbaridades en su momento), ha generado mucho miedo, temor fundado a represalias entre ciudadanos y medios de comunicación. Es lo que hemos padecido y padecemos como "pachequismo", fidelidades peligrosas que, faltaría menos, no controla ya siquiera el propio Pacheco. Y hay pruebas y víctimas a lo largo de los años.Por eso, la aportación que estos dos periodistas hicieron este domingo a través de las páginas del Diario de Jerez (grupo Joly) es impagable. Ingelmo y Fernández (los duos son buenos en periodismo, recuerden Nixon) han hecho lo que tenían que hacer (alguien tiene que hacerlo, dice mi adorado Eastwood), contar lo que se sabe y se cuenta por las calles, mostrarnos las claves del urbanismo, señalar a los que tienen las llaves y dejar el asunto publicado en papel, en la hemeroteca, para que quien lo desee pueda iniciar una investigación de oficio o tras una denuncia formal. Chaves, el presidente de la Junta, debería interesarse vivamente por el urbanismo en Jerez, como lo ha hecho con otros municipios andaluces. Que llame a Pilar. Y María José García Pelayo (PP), que se ponga las pilas y le cuente a Arenas todo lo que sabe. Las dos saben mucho, pero hay otro que sabe más. Está más que claro. Si alguien sabe de algo ilegal, ha de denunciarlo ¿o no?
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