No sé, la verdad, la razón por la que Zapatero, el actual presidente español, no ha estado en León en el Día de las Fuerzas Armadas. Menos mal que nos queda el ministro de Defensa, José Antonio Alonso, y que los Reyes nunca fallan. De todas formas ZP, como cualquiera, puede deleitarse con el avión no tripulado diseñado por el INTA que nos hemos quedado con ganas de ver volar en el desfile (donde se ponga un Tiger). Basta con que visite la web de Defensa, con buena información al respecto. La campaña institucional también usó un vídeo realmente bueno. Igual ZP está pensando una letra molona para nuestro himno nacional, o está deprimido por la frialdad de Rice, o digiriendo el fracaso de Sebastián. Incluso puede que haya una verdadera razón de Estado para su ausencia. Pero, la verdad, no se le ha echado en falta.
El presidente del Comité Olímpico Español, Alejandro Blanco, ha encargado la elaboración de una letra para el himno nacional, alentado por las peticiones de algunos deportistas que lamentan no poder cantar cuando suben al podio en las grandes competiciones. “A nadie se le escapa que, 32 años después de la muerte de Franco, los símbolos nacionales como la bandera y el himno no son todavía aceptados por una minoría que ve en ellos una determinada ideología política".
