Inmaculada Macias, periodista y compañera de La Voz de Cádiz, se ha pedido una excedencia parcial en este medio para probar fortuna en el mundo de la televisión y los gabinetes de prensa. Más exactamente, Inma se marcha a Onda Cádiz TV, emisora municipal donde se va a encargar de impulsar los programas especiales que va a originar la celebración del Bicentenario. El rumor estaba en la calle desde la pasada semana. Inma fue uno de los fichajes de Lalia González Santiago, junto a José Antonio Hidalgo, los tres del Diario de Cádiz. Hidalgo regresó al regazo de los Joly, subiendo de puesto, nómina y, se supone, que también ganó en calidad de vida (eso dice él). Es probable que el portavoz y diputado socialista Rafael Román no sea esta vez tan impulsivo y sectario -como lo fue conmigo en su momento- y acepte eso de que los periodistas se busquen la vida e intenten mejorar. Yo, por mi parte, le deseo lo mejor a Inma, una buena persona y sagaz profesional. La compañera, al parecer, ya ha comunicado su intención de abandonar la empresa a la dirección del periódico, donde le han agradecido su buen trabajo y le han deseado, como no podía ser de otra forma, éxito en sus nuevos cometidos. Tiene suerte Inmaculada porque va a trabajar con dos excelentes personas, Enrique Montiel y Enrique García-Agulló. Los "enriques" están centrados en las actividades relacionadas con el Doce. La canción es de Miguel Bosé para que entres con buen pie en Onda Cádiz, donde espero que las cosas hayan cambiado o vayan cambiando a mejor.
