El gobierno tripartito de Chiclana (PSOE, PSA y una edil tránsfuga ahora de IU), según su concejala Cándida Verdier (Urbanismo), no vería mal subvencionar la regularización de las más de 15.000, 25.000, 30.000 ó 40.000 viviendas sin licencia. Es lo que se deduce, aparentemente de sus declaraciones y posterior crónica emitida hoy en Hora 14 Cádiz, elaborada por Pedro Espinosa. La pregunta ahora es qué pensarán aquellos ciudadanos que pagan sus impuestos, que respetan las reglas del juego. Quizás haya casos en los que las familias infractoras no puedan asumir los gastos de la regularización, pero el grueso de los infractores...habrá que estar muy atentos, sobre todo los ecologistas, cuyo silencio chiclanero me parece muy sorprendente. Lo que Verdier debería hacer es explicar si es normal que, según la denuncia del PP, se habrían dejado prescribir 1.700 expedientes urbanísticos. Y si colaborarán con la Justicia, caiga quien caiga, para determinar si es cierto o no lo que denuncian PP y los dos ediles de IU en la oposición.
Pedro Pacheco, hoy, ha dado un paso atrás en sus consideraciones iniciales sobre el pacto, durante la asamblea que el PSA celebra en Chiclana (donde 'toca' poder). Lo que nadie comenta es si habrá efectos colaterales -por el tremendo 'favor' al PSOE- en ayuntamientos como el de Jerez, el más sonoro fracaso de una de las corrientes del andalucismo hasta ahora, amén de no haber sido capaces de articular una respuesta política seria en todos estos últimos años, provocando que Andalucía caiga en un juego a dos, lo más con muletilla, algo de lo que Pacheco sabe una jartá. Es un buen torero.