Un amigo cabreado es peor que el mejor de los enemigos. Igual en estos momentos es lo que piensa Fernando Santiago sobre algunos amigos suyos, que lo son de otros con mando y plaza en Sevilla, niñatos del nitrógeno (el mal de las alturas) que se creen a salvo de todo. Ellos pueden hacer y deshacer, pegar con puños de hierro, pero sus mandíbulas son de cristal y aburren hasta a las ovejas con el botafumeiro vespertino. Con el tiempo, la verdad, me he dado cuenta de cómo es Fernando Santiago en la realidad.
"El periódico El País ha rescindido, al parecer, su contrato con el periodista y presidente de la Asociación de la Prensa de Cádiz (APC), Fernando Santiago. Después de cinco años publicando todos los lunes su columna de opinión en la edición andaluza del mencionado rotativo, hoy 21 de septiembre ha dejado de editarse y ha sido sustituido por Concha Caballero". Es lo que afirma, en una insólita crónica que ha causado no pocos comentarios en la profesión, el blog Cádiz Socialista. No sé la razón por la que Santiago no acudió -igual no lo ví- el pasado fin de semana a la concurrida fiesta del V Aniversario de La Voz de Cádiz. Divertidas, para curiosos, las fotos que hizo Ignacio Casas de Ciria. En cualquier caso, compruebo que las relaciones entre Santiago y su otrora amigos de CS no atraviesan su mejor momento. De todas formas es posible que igual Santiago nos sorprenda con una colaboración especial o que llegue a seguir publicando en el diario de Prisa en otro día de la semana. (Ver)