Desterrado a España en julio de 2010. Ya está en Jerez con su familia. De pronto me llega a mi pueblo, recién iniciadas mis vacaciones, la realidad de lo que pasa en Cuba. Nació en Camagüey el 14 de noviembre de 1960. Graduado del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Camagüey en el año 1983 en la especialidad de Estomatología. Trabajó como dentista hasta 1998 que es expulsado de su consultorio por vincularse con la disidencia en el Movimiento Cristiano Liberación.
En el 2001 se incorpora a la prensa independiente en la Agencia El Mayor en Camagüey, afiliada al proyecto Nueva Prensa Cubana. Es amante del arte y la música rock y además es Maestro Masón. Es el mayor de 4 hermanos y está casado con Rebeca Antonia Rodríguez Souto. Fue condenado a catorce años de cárcel el 4 de abril de 2003 y cumplió condena en la prisión Combinado del Este en La Habana a 533 kilómetros de su hogar.
Alfredo Pulido dirigía la agencia independiente de noticias El Mayor, de Camagüey. Durante la ola represiva de 2003 fue juzgado bajo el Artículo 91 del Código Penal, acusado de ejecutar "un hecho con el objeto de que sufra detrimento la independencia del Estado cubano o la integridad de su territorio", según consta en el documento de su sentencia.
Pienso que es una excelente oportunidad para que las tres asociaciones de la prensa, especialmente la de Jerez -aunque Cádiz tiene ingentes recursos- podría ayudar a este desterrado, a quien deseo toda suerte de éxitos y felicidad en mi tierra. Vaya desde este blog mi cariño, apoyo y aprecio a la causa que ha defendido todos estos años, la de la libertad en Cuba. Es triste dejar tu tierra, y más aún que para vivir en libertad tengas que exiliarte. Suerte.
Rebeca, la valiente esposa del doctor y periodista, es una de las Damas de Blanco, (descagar libro en pdf). "Son mujeres que le reclaman a la última dictadura de América la libertad de sus esposos, padres, hijos, hermanos o sobrinos. Heroicas mujeres cubanas que con amor, dignidad y coraje están ganándole la calle a la cobardía, la vileza y el odio, al igual que lo hicieron antes otras mujeres bajo otras dictaduras. Porque, como escribió José Martí: ‘Las campañas de los pueblos sólo son débiles cuando en ellas no se alista el corazón de mujer; pero cuando la mujer se estremece y ayuda, cuando la mujer tímida y quieta en su natural, anima y aplaude, cuando la mujer culta y virtuosa unge la obra con la miel de su cariño, la obra es invencible’.
Los Van Van -