28 abr 2013

Asesinar a un periodista




Desde 1998 más de mil periodistas han sido asesinados, han perdido la vida. Miles y miles hemos perdido nuestro puesto de trabajo, algunos por aplicar la cláusula de conciencia y no ceder al chantaje de sus empresas contra un posible anunciante. Y otros muchos más por la crisis de la publicidad, la revolución digital y la pésima gestión de los grandes grupos mediáticos, donde sus ejecutivos optan por dar el tijeretazo donde es más fácil. Esta profesión se ha convertido en un riesgo y más cuando se quiere ejercer al viejo estilo, pero no todo está perdido. Nos queda internet.