3 abr 2013

El juez político o viceversa

Juan Ignacio Zoido.
Hay que revisar bien el acta de la sesión parlamentaria de hoy en Andalucía. Se ha puesto en entredicho la división de poderes, o más claro, el PSOE no ve clara tanta armonía en las actuaciones del PP y Juan Ignacio Zoido (ex juez y hoy político), y el avance de la instrucción -aún secreta- del Juzgado de Instrucción Número 6.  Mario Jiménez, portavoz parlamentario, ha sido muy duro en su intervención apuntando en esa línea pero Griñán fue más suave: "No haga de juez en la política".

La pasión política de los populares, las indisimuladas y crueles ganas de revancha por el pacto PSOE-IU, y un cierto estilo infantil de 'yolosétodoantesquetúyyaverástevasaenterar' pueden jugarle una mala pasada. La incontinencia verbal es clásica en algunos dirigentes populares. Otros/as son más prudentes.

El formato de la comparecencia -intervención y réplica del presidente, e intervenciones de los portavoces de los grupos- ha implicado dos horas de debate, sumamente enriquecedor e ilustrativo de cómo está el patio. "Por muchas mentiras que arrojen sobre mi persona o mi gobierno, no van a conseguir manchar una trayectoria limpia y decente", ha exclamado Griñán, verdadero objetivo del PP tal como demuestran las doce razones expuestas por Zoido que, por su tono, bien parecen salidas del antiguo y duro equipo asesor de Javier Arenas, hoy extrañamente ausente, callado, arrinconado, con alas de Fénix, dicen. Y ha estado bien que Griñán haya pedido disculpas en nombre de su gobierno y de los anteriores, es decir, por Chaves.