3 ene 2008

Guerra sucia en el Campo de Gibraltar

Conozco a Antonio Muñoz, activista de Verdemar -grupo integrado en Ecologistas en Acción- desde hace casi dos décadas. Y aunque no siempre ha contado con los datos apropiados para justificar sus denuncias y a veces olvida sus compromisos de caballero, la realidad es que su labor ha sido excelente estos años en la lucha contra la contaminación -política y medioambiental- en el Campo de Gibraltar. Por eso me extraña mucho, bastante, y dudo que pueda participar (como se dice en corrillos políticos y periodísticos) en una casual denuncia -basada en datos manipulados al viejo estilo de quienes ya conocen- sobre el bunkering en el Estrecho, invitando a los periodistas a que descubramos a un político metido en esos negocios. Pero Antonio, si tú ya sabes el nombre ¿por qué invitas a los periodistas?...jó. Es más que probable que Muñoz conozca la identidad de esa persona, su proyección política y sepa el daño que le puede producir en un momento muy especial cuando se deciden las listas en España en todos los partidos. Y es probable que en algún partido rival se froten las manos con la mierda inminente. Quizás algún candidato cercano a Las Cortes. Todo es demasiado casual...y las casualidades no existen, y menos en la política española tal como está el patio. En campaña todo es posible...pero que Muñoz se preste a colaborar en esta movida me extraña mucho, no me la creo, pero la nota emitida por Verdemar no me deja lugar a dudas.
La maniobra es de libro de agitpro: mancha que algo queda. Y, de paso, seguimos haciendo todos el ganso preocupados del fuel (el chocolate del loro) que mancha las playas de la bahía algecireña sin tener dos cojones para exigir que Gibraltar difunda el verdadero contenido de la carga (42.000) toneladas, del chatarrero New Flame. Estoy seguro que Bernardino León (Exteriores) y Peter Caruana (Gibraltar) han tenido que hablar de esto el otro día en Mijas. Por eso estamos en nuestro derecho de ciudadanos de conocer si Gibraltar asumirá que es necesario sacar del barco cuanto antes las 42.000 toneladas de chatarra (dicen que baterías, tubos de escape y otros desechos industriales sin aclarar). La catástrofe medioambiental que supondría dejar la chatarra a cien metros de profundidad (¿por qué no se ha pronunciado ningún científico sobre el caso?) parece evidente. Hablando en plata: se lanza mierda, un partido rival sale ganando, y se oculta el verdadero impacto del New Flame desviando la atención sobre este otro asunto inflado. Es la táctica del calamar, tan vieja...y en campaña.
Según la nota hecha pública por Verdemar-Ecologistas en Acción -siguiendo con la historia- ha llegado incluso a pedir (anteayer) una entrevista al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para exponerle los "peligros" del 'bunkering' en El Estrecho de Gibraltar "antes de que se produzca un accidente" y reiteró que "algunos políticos españoles se benefician de esta práctica" por lo que reclamó que se investigue a la empresa 'Ducar'. Según explicó, en esta zona se sitúan "muchas compañías" que calificó de "auténticos piratas del siglo XXI", que trasiegan con "alrededor de ocho millones de toneladas de fuel marino" al año.
Los tres sitios de avituallamiento que existen en el Estrecho son Gibraltar, Algeciras y Ceuta y matizó que el fuel que manejan las "gasolineras flotantes" de la zona procede del mar Báltico. En este sentido, aclaró que "cualquier crudo es perjudicial", pero el procedente del Báltico tiene el "agravante" de que posee un "mayor contenido en azufre" y, ese crudo, se está "acumulando" en la zona y afirmó que "muchas de estas compañías están dirigidas por políticos que están beneficiándose de lo que denuncian los ecologistas y sus propios compañeros de partido". Así, aunque "existen otros casos" pidió que, por ejemplo, se investigue a la empresa 'Ducar', "que está suministrada por la gasolinera flotante 'Vemabaltic', de la empresa 'Vemaoil'". Según dijo, en ella participa un político nacional, lo que calificó de "atropello" y, si bien "no sabemos si será ilegal, desde luego que parece moralmente cuestionable". Por ello, reiteró que el máximo dirigente español "debe estar al tanto de los peligros del 'bunkering' antes de que se produzca un accidente" y que el Gobierno abra una investigación para determinar "quiénes están detrás de estas gasolineras flotantes".
El Consejo de Gobierno de la Junta tiene que ofrecernos a los andaluces todas las explicaciones sobre el caso del buque 'New Flame', tal como le exigen todos los partidos de la oposición, que han coincidido en acusar al Ejecutivo que preside Manuel Chaves de "no ofrecer toda la información sobre la situación del buque y de dejación de responsabilidades ante Gibraltar". El secretario general del PP-A, Antonio Sanz, lamenta que, "después de cuatro meses", las diferentes administraciones hayan llevado a cabo una gestión "irresponsable" con respecto a este tema y aseguró que su partido va a solicitar la dimisión o el cese de la consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, así como de la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, pues afirmó que "ha habido una dejación". El dirigente popular tachó de "fracaso" las relaciones diplomáticas y acusó al Gobierno de Zapatero y de la Junta de Andalucía de "haberse cruzado de brazos y haber gestionado la crisis de forma caótica", por lo que añadió que esta misma mañana ha puesto en manos de los servicios jurídicos del partido el asunto para que se estudie la posibilidad de emprender acciones jurídicas contra la "irresponsabilidad" de las dos administraciones. Mientras, el coordinador general de IULV-CA, Diego Valderas, advirtió de la necesidad de que "los andaluces cuenten con toda la información sobre la situación creada", así como que se concreté "mecanismos de actuación de cara a nuevas situaciones que se puedan producir".