Me lo cuenta Laura Soriano, desde CCOO: "Las trabajadoras de la Clínica San Rafael de Cádiz han vuelto a ser víctimas de discriminación por parte de la dirección de la empresa Pascual y Pascual. En este caso han sido tres auxiliares que en la jornada de ayer recibían sendas cartas en las que se les comunicaba la aplicación de una serie de sanciones, tanto por no llevar el uniforme con falda como por apoyar públicamente a las compañeras anteriormente sancionadas por la dirección de la Clínica. Dos de estas trabajadoras, que no dudaron en manifestarse a las puertas de la Clínica en la concentración convocada por el Comité de Empresa de San Rafael, han recibido la comunicación de la apertura de un expediente disciplinario por usar el pijama sanitario y no el “famoso” uniforme de falda, delantal y cofia.
El caso más grave es para otra compañera a la que se le ha comunicado un traslado forzoso al hospital que la empresa Pascual tiene en Málaga. En las tres cartas la dirección de la empresa establece claramente su conocimiento de que estas tres trabajadoras son afiliadas a Comisiones Obreras. Tras la condena de la actuación del empresario y la desaprobación de un uniforme calificado de sexista por todas las administraciones, partidos políticos, sindicatos, asociaciones de mujeres y medios de comunicación, las trabajadoras de la Clínica San Rafael de Cádiz vuelven a ser víctimas de conductas discriminatorias. CCOO exige la intervención de las autoridades pertinentes para acabar con las actuaciones de este empresario, al tiempo que no descarta movilizaciones para que las trabajadoras de la Clínica San Rafael puedan realizar su trabajo con la opción real y libre de elegir el uniforme de trabajo.Además, se espera que aumente el número de trabajadoras sancionada ya que la dirección de la empresa las ha citado para entregarles sendas cartas".