Aunque Paco Aído- que me ha defraudado notablemente por sus, al parecer, habituales ácidos comentarios privados sobre mí- no acierte a comprender el valor de esta foto (lean la crónica de Mayte Hughet en La Voz), en la que aparece su hija, la ministra de Igualdad, Bibiana Aído, y la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, es la foto del año, como bien dicen los compañeros (lo son) del blog Cádiz Socialista. Conozco y aprecio a Bibiana aunque nunca hayamos intercambiado dos palabras, acaso sonrisas de protocolo, y está retomando su carrera política con más mesura (la tranquilidad emocional tiene mucha culpa) tras los tropiezos de ministra novata en los primeros meses. Bibiana tiene que ganarse día a día su puesto más que otros compañeros de gabinete, hasta que se olvide eso de los padrinos, del clan y de su padre, Don Francisco "nosinmihija" Aído. Tengo buenos oídos amigos en Madrid, tras los cuatro años que pasé en la Administración General del Estado -tres en el ministerio de Agricultura y uno en la Vicepresidencia Primera del Gobierno y el Ministerio de Economía- y lo que me cuentan es que Bibiana ha tomado nota de todo y va subiendo enteros, poco a poco, tacita a tacita y sin dar la nota. Ojalá sus compañeros socialistas de Cádiz tuvieran ese mismo sentido común para enderezar sus actos. Incluso su padre, al que yo creía con más tacto. Todo se sabe, Paco. Todo. Por cierto, hoy me daré una vuelta por Benalup y Alcalá de los Gazules, lugares que vengo recorriendo estos días atrás, hablando con mucha gente libre. En cuando a Bibiana, igual coincido con ella en Madrid, en Bruselas o en cualquier sarao del Congreso de los Diputados. Y hablaremos, estoy seguro.
17 ene 2009
Las dos, juntas
Aunque Paco Aído- que me ha defraudado notablemente por sus, al parecer, habituales ácidos comentarios privados sobre mí- no acierte a comprender el valor de esta foto (lean la crónica de Mayte Hughet en La Voz), en la que aparece su hija, la ministra de Igualdad, Bibiana Aído, y la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, es la foto del año, como bien dicen los compañeros (lo son) del blog Cádiz Socialista. Conozco y aprecio a Bibiana aunque nunca hayamos intercambiado dos palabras, acaso sonrisas de protocolo, y está retomando su carrera política con más mesura (la tranquilidad emocional tiene mucha culpa) tras los tropiezos de ministra novata en los primeros meses. Bibiana tiene que ganarse día a día su puesto más que otros compañeros de gabinete, hasta que se olvide eso de los padrinos, del clan y de su padre, Don Francisco "nosinmihija" Aído. Tengo buenos oídos amigos en Madrid, tras los cuatro años que pasé en la Administración General del Estado -tres en el ministerio de Agricultura y uno en la Vicepresidencia Primera del Gobierno y el Ministerio de Economía- y lo que me cuentan es que Bibiana ha tomado nota de todo y va subiendo enteros, poco a poco, tacita a tacita y sin dar la nota. Ojalá sus compañeros socialistas de Cádiz tuvieran ese mismo sentido común para enderezar sus actos. Incluso su padre, al que yo creía con más tacto. Todo se sabe, Paco. Todo. Por cierto, hoy me daré una vuelta por Benalup y Alcalá de los Gazules, lugares que vengo recorriendo estos días atrás, hablando con mucha gente libre. En cuando a Bibiana, igual coincido con ella en Madrid, en Bruselas o en cualquier sarao del Congreso de los Diputados. Y hablaremos, estoy seguro.
